Expertos advierten a España: Debe tener cuidado con lo que desea, puede hacerse realidad

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Publicado el: 23 de abril de 2025 a las 14:30
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España

La desnuclearización es un concepto que, hace años, unió a Europa en contra de este tipo de energía que es muy peligrosa, sin embargo, el escenario energético de la región ha cambiado sobre todo por la guerra de Ucrania y el cierre de las exportaciones del gas ruso. En este contexto, los expertos lanzan una advertencia a España: cuidado con lo que deseas porque puede ser una realidad a futuro.

El cierre de las plantas atómicas en España

Esta política tiene dos motivos fundamentales, la transición energética hacia fuentes productoras de electricidad que sean sostenibles y menos peligrosas y la obsolescencia y el fin de vida útil de todos los reactores nucleares de España. Sin embargo, en los últimos años este ha sido un tema muy debatido a pesar de que la península está muy desarrollada en la generación de energía renovable y ecológica.

Por otra parte, es factible la modernización de estas instalaciones pudiendo prolongar su ciclo de servicio seguro por 20 años más. Pero el gobierno ha decidido llevar adelante este cierre y desmantelamiento de plantas nucleares, las cuales aportan el 20 % de la electricidad consumida en el país. El plan es hacer un proceso de clausura escalonado que comienza en el año 2027 y finalizaría en el 2035.

También cierran las plantas por motivos fiscales

Los expertos han hecho una advertencia a España sobre que debe tener cuidado con lo que desea porque podría hacerse realidad. Ese aviso lo hacen en referencia al nuevo motivo que aceleraría este cierre: los tributos fiscales, puesto que los mismos son insostenibles los que hacen que su operatividad resulte financieramente inviable. Por ejemplo, se han incrementado más de un 400 % comparando con el año 2008.

Además de que se incrementaron adicionalmente un 50 % al conocerse el plan de cierre en el 2019 (esto último implica un costo de 20 000 millones de euros para la península). Y es que las plantas nucleares son pechadas con tasas e impuestos que rondan los 25 euros por cada MWh. Esto equivale, aproximadamente, al 35 o 40 % de su facturación al año lo que es demasiado para un solo sector productivo.

Por si esto fuera poco, a partir del 2013 fueron impuestos nuevos tributos que son específicos y que se asocian a los desechos radiactivos y al volumen del combustible atómico utilizado. Estos recursos tendrían como fin el financiamiento de ENRESA que es el ente que se encarga del almacenamiento de los residuos nucleares. Aunque nuestro país decidiera cancelar el cierre de estas instalaciones, estas no podrían seguir operando.

Por causa de la gran carga fiscal, la cual va haciéndose más pesada a medida que transcurren los años. Como muestra, se tiene que para el 2025 el gobierno de España fijó un incremento del 30 % en los impuestos para pagar la denominada “tasa Enresa”, lo que hace que la electricidad de origen nuclear española sea, en promedio, 12 euros por MWh más cara que la de cualquier país de la Unión Europea.

Las consecuencias del cierre de las instalaciones nucleares

Lo grave es que España ha decidido seguir con el cronograma de cierre de estas centrales, por lo menos hasta ahora, ignorando las advertencias sobre una eventual crisis eléctrica, puesto que cubren el 20 % de la demanda nacional. Aunque el crecimiento de las energías renovables ya alcanza este porcentaje, su dependencia de los fenómenos climáticos es motivo de inestabilidad del sistema.

En definitiva, el cierre de las centrales nucleares se debe a motivos de transición energética, obsolescencia de los equipos y tributos fiscales (tendrá un alto precio el cumplir esta promesa, el cual seguramente pagaremos nosotros). Por lo que España debe hacer caso a las advertencias que han lanzado los expertos sobre que debe tener cuidado con lo que desea porque se puede hacer realidad.