Nuestra sociedad avanza con rapidez hacia nuevas energías sustentables y motores de alta eficiencia que no contaminan. Los electrodomésticos que usamos a diario cumplen estrictas normas de eficiencia, por lo que cada vez consumen menos energía. Sin embargo, nuestro consumo eléctrico sigue elevándose a nivel mundial y son las inteligencias artificiales las que están en la mira ante un posible apagón mundial.
Las IA podría provocar un apagón mundial
Las IA son la innovación más reciente en la que se han enfocado las empresas de software más importantes del mundo, y la rapidez de su adopción sumado a los increíbles beneficios que puede ofrecer prometen una revolución análoga al internet en los 2000. Desde ayuda con trabajos escolares hasta escritura de código siguiendo instrucciones simples, esta tecnología está cambiando todo.
Una IA consiste en una serie de servidores que reciben las solicitudes de usuarios de todo el mundo, las almacenan, las procesan y generan contenido desde cero recurriendo a una gigantesca base de datos. Estos servidores se distribuyen en lugares físicos repartidos por todo el planeta donde se albergan miles de discos duros y tarjetas gráficas que realizan miles de cálculos segundo a segundo.
El problema es que para poder responder a cada respuesta de cada usuario de manera instantánea sin importar dónde esté, los centros de datos físicos requieren de una enorme cantidad de energía eléctrica. Esta demanda sigue creciendo a medida que los modelos de lenguaje desarrollados por OpenAI, Meta y Google se vuelven más complejos y eficaces.
¿Un invento que se volvió en nuestra contra?
Las inteligencias artificiales han demostrado ser una herramienta increíblemente eficiente para una gran cantidad de aspectos de nuestras vidas. Ayudan en la creación de contenido, ofrecen respuestas rápidas y personalizadas a consultas sencillas y se prevé una aplicación revolucionaria en el desarrollo de videojuegos entre muchas otras aplicaciones que rebasan los límites de la imaginación.
Sólo en 2022, los centros de datos físicos de las inteligencias artificiales reportaron un consumo de 460TWh de potencia eléctrica, y se espera que para 2026 esa demanda se incremente a unos 1000TWh. Este consumo eléctrico representa al total actual de Japón, uno de los países más cosmopolitas del planeta y que alberga una población de 125 millones de personas.
Las compañías desarrolladoras de estos modelos de lenguaje ya están buscando una manera de solucionar su ingente consumo eléctrico el cual también representa la emisión de toneladas de gases de efecto invernadero a nuestra atmósfera. Muchas de estas empresas ya emplean sistemas de autoconsumo sustentable pero todavía necesitan hacer más si no quieren causar un apagón mundial.
Cómo evitar el apagón mundial por las IA
Una de las soluciones que han encontrado estas compañías son modelos de inteligencia artificial pequeños que pueden instalarse en los dispositivos de los usuarios y usar los recursos disponibles en los mismos. Actualmente la mayoría de los dispositivos particulares cuentan con hardware de gran potencia que puede aliviar la demanda de poder de procesamiento de los centros de datos.
Por otro lado, Microsoft está haciendo planes para instalar centrales nucleares modulares en sus centros de datos para prevenir cualquier riesgo de contribuir a un apagón mundial. Una medida que podría terminar empeorando las cosas al incrementar los desechos nucleares.
Por su parte el CEO de OpenAI ha invertido un capital importante en el desarrollo de la fusión nuclear para generar energía limpia y renovable que permita a su tecnología seguir trabajando y mejorando.
Un futuro incierto para las IA
Las inteligencias artificiales forman parte de una corriente de tecnologías tan innovadoras que todavía faltan regulaciones para la mayor parte de sus aplicaciones. Muchas son las polémicas que rodean a las IA pero la más importante es el consumo eléctrico y la contaminación que conlleva. Puede que avances como la energía virtual que están implementando en Estados Unidos ayuden a la permanencia de las IA.











