España encuentra el material que hará caer a China: podría ser el fin de toda su industria

Imagen autor
Publicado el: 27 de septiembre de 2024
Síguenos
China, litio China

España encuentra un material que podría hacer caer a China. Sería el fin de toda su industria. El país asiático busca controlar la producción mundial de litio, mientras que otros países como Dinamarca ya prueban baterías de roca para sustituirlo. El valor de este metal está disparado y ser líder en litio es una apuesta económica significativa. Este metal de color blanco plateado es visto por muchos como el “nuevo petróleo” o “el oro blanco”.

Sin embargo, la explotación del litio puede provocar contaminación del agua, cambios en el paisaje y los ecosistemas, introducción de infraestructura en zonas naturales sensibles, impacto negativo en la flora y fauna, y producción de residuos químicos y sólidos. Además, las baterías de litio disponen de materiales potencialmente tóxicos y su fabricación difunde importantes cantidades de CO2.

Este escenario hace que un gran número de expertos busque sustituir el litio en las baterías, un producto altamente utilizado en varias aplicaciones por su alta densidad de energía y su capacidad para cargar rápidamente. No obstante, también albergan algunos problemas que pueden perjudicar su rendimiento y seguridad, como sobrecarga, descarga profunda, sensibilidad a la temperatura y creación de dendritas de litio.

España hunde a China con el material del futuro

Bajo estas circunstancias, el litio de las baterías se convierte en un grave problema que unos investigadores cordobeses buscan suplir reemplazando el litio por azufre. La batería de sodio y azufre tiene la capacidad de cargarse y descargarse más de 2.000 veces. Un grupo de científicos cordobeses ha creado una batería de sodio y azufre, que ofrece energía suficiente y no tarda en cargar los dispositivos electrónicos.

Así lo ha dejado asentado el estudio realizado por un grupo de Química Inorgánica de la Universidad de Córdoba, base de la tesis doctoral del investigador Álvaro Bonilla, publicado en Science Direct. Los investigadores expusieron que las baterías de sodio y azufre pueden estar en funcionamiento más de 15 años, según registra la web de la Universidad de Córdoba. Un dato contrapuesto a las baterías de litio (que son las conocemos por su uso habitual en móvil o coches), que se cargan un total de 120 veces al año.

Algunos compuestos provenientes del azufre tienen carácter tóxico. Sin embargo, este caso es diferente porque nos encontramos con azufre elemental, más asequible, abundante y capaz de almacenar el doble de energía. La batería no se compone únicamente por azufre, sino también por sodio, que reemplaza al litio siendo un elemento accesible y con un rendimiento similar.

El desarrollo de esta nueva batería presentaba un gran reto porque el átomo de sodio era más grande que el de litio, lo que hace más difícil el movimiento durante la carga y descarga. Los científicos para buscar una solución agregaron una estructura metálica-orgánica (MOF, por sus siglas en inglés) hecha de hierro. En última instancia, lograron que la batería funcionara de manera óptima durante más de 2.000 ciclos de carga.

España tiene el invento definitivo para robarle el reinado del litio a China

Esta idea no es del todo nueva. Las baterías que entremezclan el uso del sodio y el azufre ya habían sido creadas, pero solo podían funcionar a temperaturas superiores a 300 grados. La novedad es que esta batería opera a temperatura ambiente, convirtiéndose en un modelo más práctico y eficiente. Asimismo, han encontrado varios aspectos a mejorar, como la rapidez de carga. Todavía tarda una hora y el objetivo es bajar ese tiempo a diez minutos.

La investigación es parte del proyecto “Transición de Litio al Sodio en baterías de Azufre: Hacia una tecnología basada en elementos abundantes, económicos y sostenibles”, realizado en conjunto con la Universidad Nacional de San Luis (Argentina).

En conclusión, la pretensión de España es arrebatarle el dominio de las baterías de litio a China, sustituyéndolo por azufre. Una noticia que impacta tanto como el extraño elemento químico que buscaba desterrar las baterías de litio.