Algo inesperado ha estado ocurriendo en los cielos, no es bueno: Si miras bien podrías notarlo

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Publicado el: 1 de julio de 2025
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Al levantar la mirada hacia el firmamento, podemos contemplar la hermosura que nos brinda que nos hace pensar en las maravillas de la creación, sin embargo, también allí hay factores que son indispensables para nuestra supervivencia como especie. Aquí te damos una muestra sobre algo que es inesperado, que tiene tiempo sucediendo en los cielos y que no es bueno. Solo mirando bien se puede notar.

El efecto de cada uno de los fenómenos celestes

El producto final del proceso de evaporación del agua de los ríos, lagos, océanos y de la expulsada por las plantas, desempeña un papel muy importante en la regulación térmica y climática de la Tierra. Para ello, ejercen una especie de control sirviendo para equilibrar el calor, dependiendo del tipo de nube en los cielos este efecto será de calentamiento o enfriamiento de la corteza terrestre.

En el caso de nubes que sean delgadas y de gran altura, reflejan una parte de la radiación infrarroja que produce la superficie del planeta, estas son repotenciadas por los gases de efecto invernadero por lo que son responsables del calentamiento global. Por otro lado, están otras que son densas y más brillantes, que son las mejores para el planeta ya que reflejan hasta el 60 % de la radiación solar al espacio.

La NASA ha detectado algo alarmante en los cielos

Un grupo de investigadores de la NASA ha descubierto que la capa de nubes de baja altura que cubre la Tierra esta decrementándose a un ritmo muy rápido, esto algo inesperado que no es bueno solo debes mirar bien a los cielos para darte cuenta. Esta disminución está siendo detectada las últimas dos décadas y es una de las causas por las que se está dando el cambio climático y el calentamiento global.

De hecho, ayuda a acelerar estos últimos fenómenos (por otra parte, estas nubes podrían significar una nueva fuente de energía). Al respecto se tiene que entre un 2 y un 3,5 % de las capas de nubes de tormenta en las zonas tropicales y de clima templado han desaparecido o migrado a los polos de la Tierra, estos resultados son producto de las mediciones y observaciones hechas durante 20 años.

La desaparición de estas nubes trae como consecuencia que es mucho menos la radiación solar que es devuelta por reflejo al espacio, de manera que un mayor porcentaje de esta energía llega hasta la corteza terrestre y es absorbida por esta, dando como resultado inmediato el aumento de la temperatura agravado por los problemas de contaminación del aire.

Esto es notado en mayor grado, en las zonas de bajas latitudes y las que están más cercanas al ecuador, puesto que reciben en forma más directa las radiaciones solares. Además del efecto negativo en los cielos, este fenómeno tiene otra grave consecuencia en la salud de las personas y es que los rayos del sol han incrementado los índices de cáncer de piel, así como el riesgo de padecerlo.

¿Qué acciones se pueden tomar para paliar este fenómeno?

En realidad, a estas alturas es poco lo que se puede hacer para evitarlo, aunque se pueden mitigar sus efectos de los cielos. Lo primero que debemos hacer es aprender a identificarlo para anticipar su evolución a partir de los datos que nos den los satélites climatológicos para establecer una más eficiente gestión del clima. Asimismo, crear políticas públicas que sean enfrenten este comportamiento atmosférico soportándose en datos reales.

Para finalizar, la rápida desaparición y migración a los polos de la nubosidad de baja altura es un grave problema ambiental que se puede ver en los cielos (que va más allá de la sequía como la que ocurre en Marruecos y que está planificando enfrentarla con la siembra de nubes). Pero también se ha convertido en una amenaza a la salud pública porque se están incrementando los casos de cáncer de piel.