España será testigo del primer coche vegetal. Muy pronto podrías verlo en las ciudades de nuestro país como un auténtico servicio público. Si te sorprendió lo que te contamos sobre los coches de hidrógeno, esta noticia va a ser un antes y un después.
No hablamos solo de una noticia innovadora, sino de una revolución en lo que hoy conocemos como movilidad. Un automóvil pionero de origen vegetal y sostenibilidad en la gestión de residuos.
El avance hacia la sostenibilidad en el sector de la movilidad de inminente. Todavía no se sabe cuál es la vía más favorable, ya que hay varias en estudio, pero lo que está claro es que el mundo necesita un cambio y las investigaciones no pararán hasta encontrar la mejor opción.
El servicio público se une a la sostenibilidad: el primer coche vegetal llega a España
El vehículo pionero del que hablamos es de Liux, una compañía española que tiene como objetivo fabricar el primer automóvil de carrocería biobasada y eléctrico.
La empresa se fundó en 2020, año desde el que se ha trabajado de manera incansable en el desarrollo de un modelo que no solo sea eléctrico. Quieren dar un paso más allá y que su sostenibilidad esté presente en todos los aspectos.
El primer prototipo de Liux se presentó en noviembre de 2022 en la capital sentando un precedente. La búsqueda de Liux está asentada en la generación de un impacto positivo en el sector, tomando prácticas alineadas con la sostenibilidad ambiental y social.
Su visión se refleja en la elección de materiales biobasados y la búsqueda de soluciones innovadores para gestionar residuos.
El coche vegetal llega a España: un auténtico servicio público
Uno de los puntos principales de la filosofía de la compañía es el uso de materiales eco-amigables en la fabricación de sus modelos. En lugar de decantarse por los materiales de siempre (como la fibra de carbono), Liux prefiere apostar por la fibra de lino, un material orgánico con propiedades mecánicas extraordinarias y una huella de carbono reducida.
Su decisión incentiva la sostenibilidad y aporta un rendimiento óptimo en lo que respecta a la seguridad y la resistencia. Liux da especial importancia a la modularidad y la adaptabilidad, dos rasgos que se evidencian en el diseño de baterías intercambiables. Esto permite una mayor flexibilidad en la tecnología y la prolongación de la vida útil del vehículo.
Pese a que el proyecto conlleva una especial complejidad, Liux ha tenido una respuesta positiva de la industria y los medios de comunicación. Su idea ha generado interés de potenciales socios e inversores.
Liux: el coche vegetal que es ya un servicio público
Más allá de su objetivo de fabricar vehículos sostenibles, Liux también ha tomado el ferviente compromiso de gestionar los residuos de manera responsable y eficiente. La compañía es consciente del demoledor impacto ambiental que suponen los desechos generados por la industria automotriz, por lo que ha implementado varias medidas para minimizar su huella de residuos.
Desde el uso de trapos reutilizables hasta la valorización del 100% de los residuos originados en sus instalaciones, Liux muestra su compromiso con la economía circular. Se ha convertido en un verdadero servicio público, dado que también se ha involucrado en la divulgación y concientización de la sostenibilidad en la industria.
Mediante programas como el Mes del Desarrollo Sostenible y Colaboraciones con asociaciones, la entidad busca promover un cambio de mentalidad hacia acciones más responsables con el entorno.
De esta manera, la llegada del primer coche vegetal no solo trae una opción más en cuanto a movilidad, sino un cambio de paradigma completo. El máximo objetivo es que el usuario y las compañías de la industria automotriz comprendan la importancia de cuidar el medio ambiente.
Mientras llega ese tan ansiado cambio, se siguen estudiando diferentes opciones para bajar el impacto ambiental. Es el caso de la OCU y su análisis sobre los combustibles ecológicos.
