El hidrógeno y el gas natural licuado son las dos tecnologías en las que el sector de automoción tiene puesta su atención. Lo que está claro es que jamás volverán a mirar hacia atrás… aunque haya empresas que lo pretendan. Una de ellas está especializada en el alquiler: descubre lo que pretende hacer Hertz con los coches eléctricos.
Hertz se deshace de los coches eléctricos: se queda con los de combustión
Hertz, la empresa estadounidense de alquiler de vehículos, ha decidido deshacerse de toda su flota de coches eléctricos y regresar a los modelos de combustión tradicionales. La conocerás de verla en los aeropuertos españoles (sobre todo, en Barcelona).
Según ha anunciado la compañía, venderá sus más de 20 000 coches eléctricos en el país americano debido a varios problemas que ha encontrado con este tipo de automóviles. Hasta ahora, solo lo han hecho al otro lado del charco, no aquí.
La noticia ha cogido por sorpresa a muchos, ya que Hertz había realizado una gran apuesta por la electrificación de su flota en los últimos años. De hecho, la empresa llegó a encargar 100 000 modelos de Tesla en 2021. Una cifra impresionante, ¿no te parece?
Sin embargo, tras analizar en profundidad estos modelos, Hertz ha decidido dar marcha atrás y deshacerse de toda su flota eléctrica. La empresa se ha defendido expresando que apuesta por la sostenibilidad, pero no al ritmo que el sector está mostrando.
¿Por qué Hertz ya no va a alquilar más coches eléctricos?
Hertz ha tomado la decisión de deshacerse de su flota de coches eléctricos por varios motivos. Uno de los principales es el alto coste de tener estos automóviles en flota, sobre todo, por las pólizas de seguro (aunque una parte las asuma el cliente).
A diferencia de los coches de combustión, estos requieren una mayor inversión en reparaciones y sustitución de piezas debido a su tecnología más avanzada. En realidad, a estas alturas ya sabrás que su mantenimiento no es tan asequible como lo pintaban.
Otro factor decisivo ha sido la falta de infraestructura de carga adecuada. Al ser una empresa de alquiler que opera en diferentes países, Hertz se ha encontrado con la dificultad de no poder garantizar puntos de recarga suficientes para sus clientes.
La megaventa de Hertz: más de 20 000 vehículos
La decisión la tomó la compañía en noviembre de 2022, cuando afrontaba los efectos de la covid. Se trataba principalmente de modelos de Tesla, como el Model 3 y el Model Y, aunque también incluía vehículos de Polestar, otro fabricante de coches eléctricos.
Esta megaventa fue posible gracias al acuerdo alcanzado entre Hertz y Carvana, un minorista de coches usados online. De esta forma, Hertz logró deshacerse rápidamente de miles de vehículos eléctricos que ya no quería en su flota.
Los precios de venta fueron muy atractivos, con descuentos de entre un 15 % y un 30 % respecto al precio habitual de estos modelos. Aun así, Hertz consiguió embolsarse cientos de millones de dólares con esta operación.
Fue el mayor movimiento de venta de vehículos eléctricos de segunda mano hasta la fecha. Demostró que el mercado de ocasión para este tipo de coches está empezando a despegar (quizá un nicho de negocio al que no se le había prestado atención).
¿Qué podría suceder ahora después de esta acción de Hertz con los coches eléctricos? El sector del alquiler ha criticado esta decisión, pero lo cierto es que podrían no ser los únicos. Dos compañías de Estados Unidos se están planteando hacer lo mismo, ¿será el principio de un efecto dominó que nadie desea?













