Los coches de hidrógeno siguen siendo los menos preferidos por los consumidores, pero todo apunta a que vivirán una auténtica explosión. Las estaciones de servicio se van a modernizar, y este modelo acaba de superar un récord que se creía imposible. No obstante, la marca japonesa que mejor lo conoce acaba de afirmar que «no tiene futuro» y rechaza seguir con su producción. Te contamos los detalles.
El hidrógeno va a por lo eléctrico: es 100 % renovable y mejor en todos los sentidos
En la búsqueda de alternativas sostenibles, el hidrógeno ha emergido como una opción que promete superar las limitaciones de los coches eléctricos convencionales. Aunque la popularidad de los vehículos eléctricos ha crecido, no podemos ignorar los desafíos que plantean, como tiempos de recarga prolongados.
Lo mismo sucede con su limitada autonomía y la reducción de rendimiento en condiciones adversas. Esto no sucede con el hidrógeno, que funciona mucho mejor en cualquier condición que el eléctrico. ¿Ves dónde está el avance que el sector lleva años intentando conseguir? Como ves, están más cerca de lograrlo que nunca.
El hidrógeno, en cambio, ofrece un proceso de recarga rápido, autonomía extensa y un rendimiento estable incluso en climas extremos. Para algunos conductores, especialmente aquellos acostumbrados a largos trayectos, esta tecnología se presenta como una solución más práctica y eficiente.
La marca japonesa que ha rechazado los coches de hidrógeno
En un giro inesperado, Toyota, uno de los principales impulsores del hidrógeno, está reconsiderando su posición. A pesar de comercializar el Mirai, uno de los pocos modelos de hidrógeno disponibles en España, la marca japonesa admite que esta tecnología no tiene un futuro prometedor en el mercado del transporte personal.
Según el jefe técnico de Toyota, el Mirai no ha tenido el éxito esperado. La escasez y la dificultad en la instalación de estaciones de hidrógeno han limitado las ventas, llevando a la marca a replantearse su estrategia. ¿Sabes qué prentenden hacer? Dar el carpetazo definitivo a este combustible hasta que haya más estaciones de recarga.
La extensión de las hidrogeneras lleva varios años siendo un tema candente, precisamente, porque todavía no se ha dado. Hay proyectos en marcha que incluso la Unión Europea —reticente a todo lo que no sea eléctrico— ha visto con buenos ojos, pero muy pocos se han materializado todavía.
Aunque no renuncian completamente al hidrógeno en los coches, reconocen que se necesitan avances tecnológicos para hacerlos más accesibles. De todos modos, están pensando en mantenerlos en ciertas condiciones, por ejemplo, para dar el soporte obligado a todos los modelos que están en circulación ya.
¿Qué modelos tiene actualmente en circulación? Un vistazo a su parque móvil
A pesar de los desafíos que enfrenta el hidrógeno, Toyota ha sido pionera en el desarrollo de vehículos con esta tecnología. El Toyota Mirai, una berlina eléctrica impulsada por una pila de hidrógeno, ha sido el buque insignia de la firma japonesa.
Desde su introducción en 2020, ha destacado por su compromiso con la movilidad sostenible y su amplia autonomía de 650 kilómetros. Es uno de los modelos con este combustible que ha tenido mayor éxito, lo que les ha llevado a entrar en competencia directa con Hyundai.
Aunque el Mirai ha sido un paso audaz, la marca ahora redirige sus esfuerzos hacia los vehículos industriales, reconociendo los desafíos y limitaciones del hidrógeno en el ámbito de los automóviles de uso cotidiano. De cualquier modo, queda esperar para ver si esta estrategia queda en nada o se lleva a cabo.
Está claro que los coches de hidrógeno Toyota seguirán dando de qué hablar, tanto para bien como para mal, durante los próximos años. La decisión de esta marca japonesa deja claro que todavía vamos a ver pasos hacia delante y hacia atrás. De hecho, lo van a tener más difícil ahora que se acaba de descubrir lo que tienes que hacer para entrar con tu coche de gasolina en todas las ZBE.













