Debido a los múltiples problemas que enfrenta la superficie terrestre, por lo que ya no es segura, se ha fijado una nueva meta: vivir en las profundidades del mar. Esto ya no es una historia de ciencia ficción pues se está en el proceso de construir una ciudad en el fondo del mar que marcaría un nuevo hito en la vida humana.
Vivir bajo el mar: un sueño del hombre que tiene varios siglos
Desde que el mundo es mundo, el mar ha sido objeto de fascinación por el hombre. Pero no es sino hasta el siglo XVI cuando comienza a explorar las profundidades, aunque con medios muy rudimentarios como submarinos primitivos y campanas de buceo que no permitían pasar mucho tiempo sumergidos.
Con los avances tecnológicos, sobre todo a finales del siglo pasado, se ha logrado elevar el tiempo que podemos pasar bajo el agua a cada vez mayores profundidades. Sin embargo, no se ha logrado establecer un asentamiento permanente o ciudad que permita vivir y trabajar en las investigaciones… hasta ahora.
El proyecto de una ciudad sumergida bajo el mar ¿es posible?
Actualmente está en desarrollo, en el Reino Unido, un proyecto llamado Deep que tiene por objetivo la creación de una ciudad bajo las aguas del mar. Contempla un nivel de seguridad muy alto y reforzado, una infraestructura construida con los últimos avances tecnológicos y un presupuesto casi ilimitado.
En el proyecto prototipo se construirán un grupo de estructuras denominadas centinelas las cuales soportan la presión de profundidad de 200 metros y que tendrán la capacidad de albergar hasta seis personas. Esta área donde se asentarán es llamada zona crepuscular del océano y donde la luz apenas llega.
Estos módulos operarán, por lo menos inicialmente, como centros de investigación aunque su objetivo final es la creación de sitios de asentamientos humanos permanentes bajo las aguas de todo el mundo. Para el desarrollo y experimentación, Deep cuenta con un terreno de 20 hectáreas de superficie.
Que se encuentra en Gloucestershire donde está una cantera que fue inundada allá por los años 90. En él se están creando áreas de capacitación y entrenamiento, una base de mini sumergibles que transportarán a las personas, materiales y equipos, así como otras instalaciones para llevar a cabo pruebas y experimentos.
En lo referente a los centinelas, están diseñados para que las personas vivan en un entorno muy parecido al terrestre. Poseen amplios dormitorios, cocina equipada, baños privados con agua caliente y el espacio de trabajo es muy accesible. Están elaborados en un acero especial que permitirá estancias muy prolongadas.
Una de las principales preocupaciones del proyecto es la adaptación de las personas a vivir en el fondo del mar donde la luz llega con dificultad, ya que este entorno puede causar problemas del sueño y metabólicos. Por otra parte, para habitar los centinelas el personal deberá someterse a un prolongado e intenso entrenamiento.
En el mismo se contemplan simuladores, creados por Deep, donde evaluarán y darán técnicas de tolerancia para soportar la vida submarina en espacios reducidos (también se tendrán sembradíos que aprovecharán la técnica desarrollada para sembrar papas en Marte) así como apoyo psicológico para vivir en esta ciudad.
Un proyecto que tiene seguridad reforzada en todas sus fases
En lo que se refiere a la seguridad, esta ciudad tendrá las mejores garantías para evitar tragedias como la implosión del Titán en 2023, es por ello que este parámetro está presente desde la planeación hasta que los primeros seres humanos realicen sus actividades dentro de los hábitats.
En definitiva, esta ciudad que se va a construir en el fondo del mar representa el primer paso del hombre para abandonar una superficie que ya no es segura (como consecuencia de este colapso nuclear que afectaría al mundo). Al principio sería para investigación, pero luego será para vivir.
