Contar con un servicio eléctrico confiable genera tranquilidad en la población y favorece el desarrollo de cualquier nación. Además, resulta esencial para el buen funcionamiento de las diversas tecnologías informáticas, que facilitan la vida cotidiana. Sin embargo, con el desarrollo de nuevas fuentes energéticas, es necesario llevar a cabo ciertos cambios en el suministro de la electricidad. Y en ese caso, el interés de los usuarios estaría centrado en el costo de la luz. Porque ahora en Europa existirán casi 100 precios distintos por día, lo cual parece una locura.
Europa cambia y se adapta energéticamente
La calidad del servicio eléctrico es esencial para que la sociedad en general pueda funcionar de una manera fluida en todas sus áreas. Y no solo es cuestión de la producción de energía, sino que esta debe adaptarse para ser capaz de responder a las nuevas exigencias. Porque los requerimientos son cada vez mayores, tanto en calidad como en cantidad. Y adicionalmente a eso, su producción debe ser limpia y libre de emisiones.
Obviamente, esto requiere de inversiones significativas, para poder acondicionar los sistemas que existen actualmente, para que puedan soportar las nuevas fuentes energéticas. Este proceso también implica que haya algunas variaciones en la relación entre las empresas productoras de electricidad y sus clientes. Tal como se evidencia en el hecho de que en Europa el costo de la luz ahora es una locura, porque tiene casi 100 precios distintos cada día.
Se estrena un nuevo sistema de tarifas eléctricas
A partir del 1 de octubre del 2025, Europa estrena un nuevo sistema que cambia la manera en que se realizará el cobro de las tarifas eléctricas. Porque, aunque parezca una locura, la luz tendrá casi 100 precios distintos por día. Y es que ahora, el costo será determinado cada 15 minutos, con la finalidad de lograr una mayor exactitud entre la disponibilidad de energía y el consumo. Y eso permitirá adaptarse mejor a las renovables.
Esto tendrá diferentes consecuencias para los diversos clientes en España, por ejemplo, a nivel de los hogares, la factura seguirá siendo la misma. Es decir, que continuará reflejando el consumo cada 60 minutos, calculados mediante un patrón de extrapolación lineal. Esto se mantendrá de esta manera, porque los medidores tipo 4 y 5 no pueden realizar mediciones cada cuarto de hora. Y no serán cambiados en el corto plazo.
Lo mismo ocurrirá con los usuarios del mercado libre de electricidad y de la tarifa regulada PVPC. De manera que estos inicios de la tarifa cuartohoraria de electricidad en Europa no serán iguales para todos. Pues quienes se encuentren por debajo de la banda de los 50 kW de consumo, no verán reflejado ningún cambio en sus facturas. Esa diferencia solo se hará realidad con el cambio de medidores aunque si ahora pagas mucho mejor que conozcas estos dispositivos.
Períodos más cortos y acordes con las renovables
El nuevo mercado cuartohorario que se impondrá en Europa resultará efectivo para las empresas españolas cuyo consumo sea mayor a los 50 kW. Ya que sus medidores sí pueden realizar las cuantificaciones cada 15 minutos, así que sus facturas mostrarán 96 tarifas diarias. Esto permite que haya una mayor flexibilidad, tal como lo requieren las renovables. Pues estas varían a lo largo del día, incluso en cuestión de minutos.
Y el método cuartohorario permite una mejor adaptación a su intermitencia, así como también su óptimo aprovechamiento. Porque un aumento del precio que abarque un periodo menor a los 15 minutos no provocará el aumento de la hora completa en Europa. Pero no todo son ventajas, porque ahora los cálculos de sus pronósticos de consumo tendrán que ser más exactos, ya que los errores serán más evidentes, y eso genera sanciones económicas.
En definitiva, el costo de la luz en Europa parece una locura, con la llegada del nuevo sistema que genera casi 100 precios distintos por día. Porque a partir del 1 de octubre, la tarifa será determinada cada 15 minutos. Pues de esta manera, será más flexible y se adaptará mejor al uso de las renovables. En los hogares, y quienes estén por debajo de 50 kW, no notarán diferencias en sus facturas. Mientras que los que están por encima de esa banda serán los primeros en disfrutar, o padecer, estas tarifas, aunque es muy extraño que produzcamos mucha energía pero es más costosa.
