Este es un problema que ha venido aumentando en los últimos años y aunque se había pensado en las graves consecuencias de que se estén derritiendo no se había tenido conciencia sobre aquellos males que se liberan una vez que lo hacen. Veamos que es esa peor consecuencia de la que ahora se cae en cuenta.
El problema surge y aumenta una vez que esos bichos están libres de su fría prisión
Ya no es por el viejo problema del aumento en los niveles de agua que pueden provocar inundaciones o desplazamiento forzado de algunas especies y que generan desequilibrio en los ecosistemas, ahora ha aparecido un nuevo factor de amenaza que incrementa las nefastas consecuencias que está produciendo el rápido deshielo.
Con el progresivo aumento de la temperatura global se está produciendo un acentuado derretimiento de los glaciares, esas imponentes masas de hielo que se desplazan por los mares cercanos a los casquetes polares, creyéndose que solo el aumento del nivel de agua podía ser la más nefasta consecuencia.
No obstante, quienes quieren salvar los glaciares recientemente informaron sobre la comprobación de que, además de contener agua, este inmenso bloque de hielo mantiene en su parte más baja minerales, gases y materiales orgánicos, los cuales quedarán libres una vez que el tempano se va disolviendo poco a poco en aguas menos heladas.
Los gélidos gigantes están liberando con mayor rapidez todo lo que tienen dentro de sí
Entre los años 2022 y 2024 se produjo la mayor pérdida de masa glaciar de la historia, alcanzando un derretimiento de 450 000 millones de toneladas en el último año del periodo hidrológico y por encima de los 9 billones de toneladas de masas heladas se han juntado con el agua de los mares desde 1975.
Los datos anteriores son registros de dos importantes organizaciones encargadas de monitorear este fenómeno atribuido al calentamiento global. Una de ellas es la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y la otra es el Servicio Mundial de Vigilancia de los Glaciares o WGMS, por sus siglas en inglés.
Aparte de las toneladas de agua que se estarían volcando al mar, según Arwyn Edwards, científico adscrito a la Universidad de Aberystwyth en Reino Unido, hay toneladas de bacterias que están quedando libres una vez que el hielo deja de retenerlas y por ende empezarán a circular libremente por las aguas de los mares cercanos.
No existe claro conocimiento sobre el tipo de bacterias que se encuentran dentro de los glaciares, por lo que no se sabe a ciencia cierta si algunas de estas representan alguna amenaza para la salud de las personas, así como tampoco se ha podido saber si estas una vez liberados están vivas, en estado de latencia o muertas.
Se sabe que están allí y que son muchos pero se desconoce si son amigables
Una de las cosas que sí se ha podido conocer es la cantidad aproximada que es liberada, pues los científicos han realizado análisis microbianos a muestras de la corteza erosionada y entornos correspondientes a 10 glaciares que se encuentran flotando en aguas del hemisferio norte próximos a
- Los Alpes europeos
- Groenlandia
- Svalbard
- Ártico canadiense
Los análisis microbianos realizados permitieron comprobar la presencia de decenas de miles de microbios en un mililitro de agua, por lo que se estima que al menos en los próximos 80 años más de 100 000 toneladas de bacterias serán liberadas en las aguas contiguas al glaciar derretido, cantidad que aumentará en la medida que empeore el calentamiento global.
En conclusión, el problema ya no es únicamente que se estén derritiendo los glaciares, sino que se liberan al mar toneladas de microbios de naturaleza desconocida, por lo que se necesitará un mayor número de investigaciones que permitan determinar el enorme impacto ambiental que tendrá esta nueva consecuencia del calentamiento planetario.








