Fue en 2013 cuando Elon Musk planteó la idea de unir dos continentes mediante un túnel trasatlántico por el cual se desplazaría un tren submarino a hipervelocidad, pero primero debe superar algunos desafíos.
Así es como Musk quiere unir dos continentes y a 20 mil millones de personas
Londres y Nueva York están separados por casi seis mil kilómetros de tierra y agua y el multimillonario dueño de SpaceX planteó hace más de una década construir un sistema hyperloop para recorrer este trayecto en aproximadamente una hora.
Dicho sistema comprende un túnel transatlántico y un tren que se mueve a través de tubos de vacío con el que se puede disminuir la resistencia que ofrece el aire y así alcanzar una velocidad cercana a 4.800 Km/h, sumándose a este récord.
Para tener una idea de la escalofriante velocidad que alcanzará el tren futurista de Musk basta saber que actualmente el tren más veloz del mundo, Shanghai Maglev, se desplaza a 460 Km/h, es decir, lo hace a un décima parte de la que alcanzará el nuevo tren submarino hyperloop.
Esta novedosa idea podría hacer que el trayecto entre las dos importantes capitales pueda recorrerse en aproximadamente 70 minutos, lo que sin duda sería maravilloso.
La fortuna del dueño de Tesla no es suficiente: No solo es cuestión de dinero
El desarrollo de un proyecto de tren submarino ultraveloz que recorra una distancia tan extensa entre dos capitales opuestas en el mapa enfrenta complejos inconvenientes que se traducen a la necesidad de desembolsar una cifra astronómica.
Sin embargo, para llevar a cabo este colosal proyecto no solo se necesitaría mucho dinero, sino además una altísima tecnología de punta que aún no está disponible.
Es decir, la puesta en marcha de este tren presurizado a altísimas velocidades supone la superación de varios obstáculos técnicos que se traducen a grandes desembolsos de dinero y la búsqueda de tecnologías.
Cuánto se necesita para desayunar en Londres y almorzar en Nueva York el mismo día
El coste de desarrollar el proyecto del tren hyperloop Londres Nueva York, según las estimaciones, apunta a la friolera de un poco más de 18 billones de euros.
Sin embargo, tal cantidad para unir estas dos ciudades del mapa mundial no supone un imposible, pues según la revista Forbes el patrimonio de Musk asciende a 421 billones, por lo que esta inversión está dentro de sus posibilidades, además de que naturalmente sería un desembolso compartido entre gobiernos y otras compañías mundiales quienes estarían interesados en invertir para obtener parte de los inmensos beneficios que este proyecto generaría.
El multimillonario de origen sudafricano ha planteado la reducción del precio en una fracción del coste estimado a través de la participación de su empresa The Boring Company, la cual tiene el aval de haber construido el Vegas Loop, un sistema de transporte subterráneo en la ciudad del pecado.
Una alternativa al plan de Elon Musk es un avión comercial supersónico, denominado por la empresa fabricante Boom Technology como XB-1 en su periodo de pruebas, en las cuales llegó a desarrollar una velocidad de 926 Km/h, un tercio de la del tren hyperloop pero con un recorrido entre las dos capitales que demoraría solo 3 horas y media.
Asimismo, el exitoso hombre de negocios y dueño de la red social X también ha planteado el uso de cohetes espaciales para cubrir las ruta entre las importantísimas capitales, demorando solo 30 minutos en completar el trayecto con una velocidad de 29 mil kilómetros por hora.
En conclusión, el deseo de Musk de unir el continente europeo y el norteamericano mediante un tren hyperloop con tubos al vacío submarinos son aspectos que cambiarían la faz de la tierra, y eso fuera posible si se tratara solo de dinero, pero los desafíos van mucho más allá y actualmente en su mayoría son tecnológicos, aunque China podría unirse a esta iniciativa.








