¿Cuál es la primera potencia de la Unión Europea? La opinión siempre ha estado dividida entre quienes piensan que es Francia y quienes consideran que es Alemania. Sin embargo, parece que tenemos una respuesta clara, al menos, en términos de generación de energía renovable. Uno de los dos países ha superado su propio récord: ya supone más de la mitad de la que producen.
¿Cuál es el país europeo que más energía renovable produce? ¿En qué puesto está España?
España ha dado pasos de gigante en la generación de energía renovable, ubicándose como el segundo país europeo que más electricidad produce a partir de fuentes eólicas y solares. En 2021, el sol y el viento contribuyeron con más de 86 TWh, aproximadamente un tercio de toda la producción eléctrica nacional.
Un informe reciente destaca que España ha alcanzado un máximo histórico, generando casi el 47 % de su energía a partir de renovables, liderando con un incremento notable en la producción eólica y solar fotovoltaica. Este logro no es casualidad; es el resultado de una estrategia a largo plazo para diversificar la matriz energética.
La inversión en tecnologías limpias y la implementación de políticas que fomentan la generación de energía renovable han impulsado el crecimiento constante de estas fuentes en España. El compromiso con la sostenibilidad ha llevado a una transformación notable en el paisaje energético.
La potencia que acaba de marcar un hito en generación de energía
Alemania, por su parte, ha superado un hito impresionante al lograr que más de la mitad de su energía sea de fuentes renovables. Este logro, que representa un 55 % de la producción total de electricidad, demuestra el firme compromiso del país con una transición energética sostenible.
La energía eólica y solar desempeñaron papeles fundamentales, alcanzando cifras récord en 2023. Pero, ¿cómo logró Alemania este avance significativo? La respuesta radica en su enfoque integral hacia la sostenibilidad. La inversión en tecnologías de energía renovable ha sido una prioridad, respaldada por subvenciones.
La diversificación de las fuentes de energía y el impulso constante hacia la eficiencia energética han sido factores clave. Además, el compromiso de la sociedad alemana y las empresas en la reducción de emisiones han contribuido al éxito de esta transición.
En 2023, Alemania alcanzó una cuota récord del 59,7 % en la generación pública neta de electricidad a partir de energías renovables. La energía eólica, en particular, contribuyó con 139,8 teravatios hora (TWh) o el 32 % de la generación pública de electricidad.
¿El objetivo de Alemania? No quedarse en el 55%
Alemania no se conforma con el 55 % y ha trazado una meta audaz: que el 80 % de su consumo de energía sea renovable para 2030. Este objetivo se ve facilitado por la disminución en el uso del carbón, que cayó al 26 % en 2023, contribuyendo significativamente a la reducción de emisiones.
Esta disminución en el carbón se produjo a pesar de un aumento temporal en su uso tras la interrupción en el suministro de gas ruso debido a la guerra en Ucrania. Además de la generación de electricidad, Alemania ha ampliado sus horizontes en términos de colaboración energética.
Las importaciones de electricidad aumentaron significativamente, comprando 54,1 TWh a países vecinos, en comparación con 33,2 TWh en 2022. La mayoría de las importaciones provinieron de Dinamarca y Francia, mientras que los principales destinos de exportación fueron Austria y Francia.
Como ves, la energía renovable puede ser un claro indicador para conocer el desarrollo de un país. Quizá no a corto plazo, pero sí para el futuro. De hecho, coinciden si señalamos a Alemania como la nación que más apuesta por estas y, a su vez, la que tiene el mayor PIB del continente (Rusia aparte). Un récord como el que han marcado recientemente señala que hay quienes sí lo están haciendo bien.
