España denuncia a la Unión Europea y siembra el caos entre los países miembros, luego de que dicha denuncia fuese aprobada por las Cortes Generales españolas. Pero, ¿de qué trata? y, sobre todo, a qué se refiere? Aquí trataremos de dilucidarlo y comprenderlo.
El Tratado sobre la Carta de la Energía (TCE) y otros acuerdos
La aprobación de la acusación, por parte de España, se dio después de un amplio consenso en los debates realizados. Aunque el TCE es reconocido por España debido a la protección que brinda a un amplio grupo económico de todos los países pertenecientes a la Unión Europea
En el sentido de cuidar sus inversiones contra las continuas reformas realizadas a la legislación que rige las energías sostenibles y renovables en los años comprendidos entre 2010 y 2014. Y es esta protección el motivo de la denuncia de nuestro país contra este tratado.
La denuncia: ante quién se realizó y sus consecuencias
La misma se realizó el 16 de abril de 2024 a través de una Nota Verbal que fue entregada al Ministerio de Asuntos Exteriores de la República de Portugal, esto por su calidad de depositario del TCE. Portugal también está en contra este tratado, por lo que no continuará con esta función.
El Boletín Oficial del Estado publicó esta crítica, realizada por España, el día 14 de mayo de 2024. En consecuencia, España se retirará del TCE y del Protocolo de la Carta de la Energía referido a las perspectivas ambientales y la eficacia energética renovable.
Los cuales estaban vigentes, tanto para España como de manera general para todos los países que suscribieron este tratado, desde el 16 de abril de 1998. Esta retirada de nuestro país comenzará a entrar en vigor a partir del 17 de abril del año 2025.
Es de señalar que las inversiones y negocios efectuados por empresas y grupos extranjeros, en territorio de España, así como los realizados por entes españoles en otros estados que hayan suscrito el TCE seguirán protegidos por este.
Esto hasta el 17 de abril de 2045, es decir, 20 años después de la retirada formal de España tal y como se desprende de sus estatutos. Ahora bien, el caos surge cuando a partir de la denuncia de España, la mayoría de los países siguen su ejemplo al encuadrarse en una discusión más abierta.
Donde la Unión Europea, asesorada por la Comisión Europea, legisló y acordó votar por la retirada coordinada pero irrevocable de todos los países miembros. Ahora bien, se debe señalar que la denuncia de España solo afecta a las inversiones que se haga a partir del 17 de abril de 2025.
Pero no a las que se hagan en el presente o antes de esa fecha. Igualmente, tampoco afectara a aquellas que ya estén consolidadas o en marcha. Es decir que, hasta el 17 de abril de 2025, las empresas pueden suscribir nuevos contratos bajo la protección jurídica del TCE.
El motivo de esta acusación por parte de España y la energía prohibida
Esta denuncia está soportada por varias razones, pero la principal es la incompatibilidad con el Tratado de París, que controla y elimina todas las fuentes de emisiones de CO2 comenzando en el año 2035. Esto por la protección que da el TCE a las inversiones en energía no sostenible.
Como son las fuentes energéticas que usan combustible fósil. Ya que como consecuencia de la lucha de España contra esta energía prohibida, que pone en peligro al país y al mundo, ha sido condenada a pagar grandes sumas de dinero por las disposiciones sustantivas del TCE.
En conclusión, las razones de la acusación de España contra el TCE, que implican su retiro de este tratado, están plenamente justificadas, tanto así que han creado un auténtico caos por el retiro de los demás países miembros que también entran a no querer esta energía prohibida y contaminante.











