El hidrógeno verde es una fuente energética que es sostenible y amigable con el medio ambiente, el cual también tiene múltiples usos como combustible. En sus aplicaciones España es pionera fiel a su compromiso contra el cambio climático. Aquí te presentamos lo que ningún país había conseguido y el nuestro sí.
Las baterías de hidrógeno verde: un importante avance en esta fuente de energía
El diseño y producción de baterías de hidrógeno verde, a pesar de su gran necesidad, ha sido muy poco implementada por la tecnología que implica y las dificultades de hermeticidad que conlleva. Ello ha hecho que muy pocas empresas las fabriquen, apenas existen unas seis a nivel mundial que lo hacen.
Una de ellas se encuentra en España, concretamente en Asturias en la localidad de L’Entregu. Su nombre es H2 Vector y está compuesta por un equipo de 9 individuos. Esta compañía es muy reconocida en el sector llegando incluso a instalar sus baterías en Portugal, Estonia y, por supuesto, en la península.
H2 Vector: crea baterías infinitas de hidrógeno verde
Estas baterías se consideran, energéticamente, prácticamente infinitas, tanto por su durabilidad como por su capacidad. Esto último lógicamente dependiendo de sus especificaciones. Solo necesitan agua purificada y electricidad de fuentes energéticas renovables, como paneles solares, para alimentar unos armarios.
Con los cuales pueden obtener hidrogeno y almacenarlo como forma de energía de la cual dispondrán de acuerdo a la necesidad en la fabricación de las baterías. La cuales tiene distintos usos como son en el hogar, comercio o la industria. De hecho, tienen cinco proyectos nacionales e internacionales en su cartera.
Uno de estos es el Proyecto Perte liderado por RENFE (Red Nacional de Ferrocarriles Españoles) donde se está trabajando en el diseño de trenes que usen las baterías de gas verde como fuente de energía. Asimismo, investigan junto a Arcelot Mittal como integrar esta tecnología al sector siderúrgico.
Una de las premisas de H2 Vector es que el diseño de sus equipos sea de tecnología limpia y estén orientados a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero así como a paliar el cambio climático. Para ello deben ser maximizadores de la eficiencia como sistemas de almacenaje de energía.
DAHSS Energía: el proyecto punta de lanza de H2 Vector
Este es un proyecto que presenta una manera totalmente innovadora de almacenar hidrogeno que es en compuestos sólidos. Ya que aunque este gas tiene una muy alta densidad energética, el mayor reto tecnológico en su uso es el almacenamiento que requiere una muy alta hermeticidad.
Y es aquí donde el Proyecto DAHSS Energía interviene puesto que al desarrollar la forma de almacenaje en compuestos sólidos, los usuarios pueden escoger como almacenarlo. Que puede ser en forma de sólidos, líquidos o gas comprimido.
De estos tres, el almacenamiento en sólidos es el preferido como una solución a largo plazo para necesidades muy particulares. Como cuando sea necesaria una carga disponible y rápida independientemente del emplazamiento o donde el volumen sea una variable importante.
Este proceso se puede realizar de dos maneras: por quimisorción y fisisorción. La primera implica una reacción química con la cual se obtiene una interacción muy fuerte entre el material sólido y el hidrógeno. Lo que hace necesario un aporte energético muy grande para poder recuperar el gas.
Por su parte, la fisisorción crea una débil interacción entre los elementos por lo cual la liberación del gas es más sencilla y rápida. Sin embargo, está limitada a cierto volumen del compuesto. Entonces, con el proyecto se investiga cuál de estos procesos es aplicable según la situación particular.
Concluyendo, España a través de H2 Vector es pionera en este proceso que no ha logrado ningún país y que es un paso más en la transición energética hacia el hidrógeno verde. Lo que representa un orgullo tecnológico para nuestro país.











