La concientización en la lucha contra el cambio climático ha llegado a sensibilizar a muchos gobiernos del mundo. Entre ellos se encuentra España, quien ha fijado una serie de normas para que todo su transporte funcione usando estos combustibles, que por cierto no son ni gasolina ni electricidad.
Los combustibles priorizados para que funcionen los medios de transporte españoles
El gobierno español, vista la cercanía de la fecha límite del 2030 para el cumplimiento de los objetivos establecidos por la Unión Europea en cuanto al uso de combustibles renovables en el sector transporte, ha incrementado sus exigencias en detrimento de los fósiles tradicionales.
Es por ello que está fomentando el uso de fuentes de energía ecológicas, priorizando el hidrógeno y el biogás renovable para todos sus medios de transporte de pasajeros y mercancías. Así lo estableció en una orden ministerial a través de su último Boletín Oficial del Estado (BOE).
Los parámetros establecidos por el gobierno para el cumplimiento de este objetivo
Este objetivo se está promoviendo a través del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, quien ha dictado el mecanismo para el uso de carburantes en el área de transporte. Lo que llama la atención es que no es electricidad ni gasolina, como pudiera pensarse.
Sino carburantes ecológicos, específicamente el biogás y el hidrógeno, por ser de cero emisiones de CO2. Aunque la orden no cambia la preferencia por el bioetanol o el biodiésel, sí potencia e impulsa la priorización de fuentes energéticas renovables que no sean termocarburantes o energía eléctrica.
Se debe recordar que España firmó un acuerdo que establece que un 29% de la demanda del transporte terrestre debe ser de energía renovable para el año 2030. Por ello, la disposición ministerial robustece, al mismo tiempo que hace más flexible, el Sistema de Certificación de Biocarburantes
Con el fin de tener un método más realista para hacer los cálculos que determinan el cumplimiento de los objetivos anuales en cuanto a los combustibles renovables utilizados en el sector. El uso del biogás y el hidrógeno entra a computar para el cálculo que se hace para los objetivos.
Pero la energía que produzcan se valorará el doble que la de otros combustibles como el biodiésel y el bioetanol. Con esto se busca estimular su producción y la utilización priorizada de las energías renovables no biológicas como el hidrógeno o el biogás.
Igualmente, impone que el consumo de estos combustibles debe alcanzar, por lo menos, una media de un 12% para el año 2025. Asimismo, incluye, por primera vez, dos sectores de transporte no tradicionales como son la aviación y el marítimo, los cuales tendrán un tratamiento muy especial.
Esto con el fin de incentivar la producción e introducción de medios de impulso que funcionen con hidrógeno o biogás. El mismo consiste en que cada unidad energética utilizada en el mar o el aire valdrá 1,2 veces la usada por vehículos terrestres en tierra firme.
¿Qué dice la norma respecto a la Plataforma Sicbios?
Esta plataforma, que sirve para supervisar el cumplimiento por parte de los agentes obligados, establece que estos deben colocar los combustibles renovables en el mercado en la misma proporción que sus otros carburantes. En caso de incumplimiento, serán multados.
Igualmente, contempla certificaciones provisionales trimestrales y semestrales, así como pagos por multas de compensación que pueden ser anticipados, cuyos montos y cantidades van de acuerdo al grado de incumplimiento de los agentes. Que será determinado una vez realizado el cálculo.
En conclusión, como podrás ver en todo lo expuesto, España se ha tomado muy en serio el tratado sobre descontaminación del ambiente. Para ello, ha establecido nuevas normas para que todo el transporte opere con dos combustibles que no son electricidad ni gasolina.













