Los actuales desastres naturales como sequías, tsunamis, inundaciones, etc. tienen su origen en el cambio climático que ha trastocado el comportamiento ambiental en distintas regiones del planeta. El mismo es ocasionado por las emisiones de elementos de efecto invernadero. Te presentamos un gas que es poco conocido pero que puede acabar con la vida en la Tierra ya que es 300 veces más tóxico que el CO2.
¿Por qué son tan dañinos los gases de efecto invernadero?
Cuando hay una alta concentración de estos gases, que son producidos en gran parte por las actividades del hombre, se intensifica el efecto invernadero natural y en la Tierra se atrapa más calor del que se libera al espacio. Esto produce incrementos de temperatura que se llaman “calentamiento global” y es una de las principales causas del cambio climático puesto que altera el clima en las zonas terrestres.
El gas más conocido es el CO2 porque es el que más se observa en las emisiones de humo producidas por distintos procesos del hombre como quemas, por combustión de los motores de los vehículos de transporte terrestre, marítimo y aéreo, en las industrias, etc. Trae graves consecuencias climáticas y sobre la vida en la Tierra, sin embargo, este no es el único gas que es perjudicial para la vida en el planeta.
Un gas que, junto al CO2, podría extinguir la vida en el planeta
Hay un gas en el planeta que es 300 veces más tóxico que el dióxido de carbono, aunque no es tan conocido, por lo que no debemos descuidarlo. Estamos hablando de óxido nitroso que es mucho más potente que el CO2 para el calentamiento de la atmósfera del planeta y tiende a degradar la capa de ozono. Su vida media antes de degradarse es de 114 años, por lo que su influencia negativa en el clima es bastante acentuada.
Este elemento, también conocido como “gas de la risa”, se estima que corresponde al 6 % del total de las emisiones y, a pesar de su gran contribución al cambio climático, el óxido nitroso no es tomado en cuenta en las políticas de protección del clima (como en las medidas tomadas contra el fenómeno climático llamado hipercán) mientras tanto, su concentración sigue aumentando.
Los investigadores adscritos al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de los Estados Unidos han dicho que, aproximadamente, el 75 % de las emisiones totales del óxido nitroso son originadas por la agricultura, ya que en el suelo agrícola se usan de manera indiscriminada e intensiva, fertilizantes que son sintéticos nitrogenados y amoniacales debido a una razón muy sencilla.
Y es que producen un crecimiento en el rendimiento de las cosechas, lo que se traduce en más alimentos para el mundo. Sin embargo, esta forma de uso hace que haya un excedente de estos compuestos en detrimento del ambiente. Puesto que con las lluvias contaminan los acuíferos y por la evaporación se transforman en óxido nitroso que va acumulándose en la atmósfera del planeta para ayudar al efecto invernadero.
La solución a corto plazo para evitar que se siga acumulando el óxido nitroso
El incremento de este gas se produce principalmente porque los agricultores usan estos fertilizantes en forma concentrada unas pocas veces al año sin importar si los cultivos lo pueden absorber o no. Por lo que una de las soluciones para reducir la emisión de óxido nitroso a la atmósfera del planeta es aplicar el fertilizante cuando las plantas lo requieran lo que se puede determinar previo estudio.
En conclusión, el óxido nitroso es el gas de efecto invernadero más perjudicial para el planeta puesto que es 300 veces más tóxico que el dióxido de carbono (aunque ya está en proceso el proyecto que lo cambiará todo al no emitir estos gases). Las tres cuartas partes de este elemento son producidas por la agricultura a través de los modernos fertilizantes que usa de manera indiscriminada.
