Existen diversas profecías acerca del momento de la extinción de la humanidad, así como también variadas sugerencias para evitar que esto se produzca; sin embargo, hasta ahora nunca se había escuchado decir que cubrir de negro una superficie sería suficiente para detener el angustiante final. Veamos de qué trata.
Cubrir de negro grandes extensiones de superficie es la medida que detendrá la extinción
Desde hace décadas atrás una posible y preocupante extinción de la humanidad ha sido asociada a variadas razones que van desde el impacto de un gigantesco asteroide hasta el agotamiento de recursos, pero en los últimos años la causa que empieza a ser considerada como la más probable es el calentamiento global.
El incremento de la temperatura en la Tierra se considera como el problema más álgido para la humanidad porque está provocando en todo el mundo el deshielo de los casquetes polares, sequías, inundaciones, entre otros males; y este aumento obedece principalmente a la acumulación de gases de efecto invernadero.
Entre las principales medidas que se han propuesto para enfrentar el cambio climático que ha tomado auge en los últimos años se encuentra la sustitución de los combustibles fósiles por fuentes energéticas renovables, y en este sentido un estudio de Gran Bretaña señala que la medida más eficaz es cubrir grandes extensiones con placas fotovoltaicas.
No quedará ningún tejado de los grandes centros urbanos sin recolectar los rayos del sol
Han surgido propuestas de desarrollar granjas solares, en decir, en el ámbito rural, así como en vastas superficies acuáticas; sin embargo, estudios como el señalado han podido comprobar que el cubrimiento de azoteas en las ciudades es la forma más eficaz de alcanzar la transición energética.
La colocación de placas solares en los tejados conlleva una reducción de la implementación de parques solares porque estos necesitan ocupar vastas extensiones de superficie, llegando a desplazar poblaciones y provocando la destrucción de hábitats. De allí que sea mejor cubrir de placas solares en los grandes centros urbanos a:
- Viviendas
- Negocios
- Industrias
En el estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Sussex se emplearon la modelación de minería de datos geoespaciales para así construir un mapa del área global con todos los tejados disponibles, pudiendo comprobarse que previo al 2050 la energía fotovoltaica alcanzada reduciría el calentamiento global entre 0,05 y 0,13 °C.
Esta es la cantidad de energía que produce un tejado del tamaño de Italia cubierto de placas solares
La evaluación de la potencia total de la energía fotovoltaica producida por las instalaciones en azoteas para la limitación del calentamiento global se requiere elaborar el mapeado con una resolución de un kilómetro, analizar de manera específica cada región y considerar los siguientes datos:
- Cantidad de recursos solares individuales
- Tipo de infraestructura existente
- Intensidad de carbono de la red
Este procedimiento de cálculo fue realizado con una extensión de 286 393 km2 de techos alrededor del planeta, lo que equivale a la superficie territorial de Italia y se obtuvo como resultado que la energía solar generada se traducía a 19 500 TWh anuales de electricidad, por lo que puede sustituir completamente la producida por combustibles fósiles.
Esta sustitución de la electricidad generada por combustibles con emisión puede lograrse al combinarse la energía fotovoltaica producida con la gestión de la carga y el almacenamiento eléctrico en baterías, reportando esto amplios beneficios ambientales y climáticos con la reducción de la huella de carbono.
En conclusión, el estudio de Gran Bretaña ciertamente permitió comprobar que cubriendo una extensa área con placas fotovoltaicas esto significa la detención del proceso de extinción del planeta y puede conllevar fundamentalmente a una importante reducción de la huella de carbono.











