Hay un combustible cuyo uso está ganando terreno en el mundo rápidamente porque se considera más limpio y renovable al producirlo a través de la fermentación de azúcares y almidones ¿Quieres conocer las ventajas que posee el etanol?
Por qué el etanol se considera un combustible muy limpio
La tendencia actual en el contexto energético es la electrificación, porque resulta de mayor eficiencia que el motor de combustión interna. Sin embargo, la eficiencia energética y ambiental de un motor se aprecia de acuerdo a las alarmantes emisiones de gases de efecto invernadero que emita.
En tal sentido, frente a los mayores costes que representa la electricidad surge un combustible que es visto como ideal para la descarbonización de una manera más accesible, representando en sí una solución eficiente y económica.
Desde el punto de vista de la eficiencia, en comparación con la gasolina, el etanol ofrece la posibilidad de reducir un 60% de las emisiones de CO2, lo cual es posible mediante la absorción de carbono que se produce con los cultivos de caña de azúcar.
En este particular, Plinio Nastar, economista que ha comparado los costes del etanol frente a otros combustibles, sostiene que la popularidad del etanol como combustible en los coches se incrementará en detrimento de los que usan batería debido a los avances tecnológicos.
Ventajas del etanol como combustible
La emisión de carbono al utilizarse etanol es tan baja como cuando se utiliza electricidad, de allí que frente a los coches ciento por ciento eléctricos, este derivado de hidrocarburos presente como ventajas:
- Amigable con el ambiente
- Costes reducidos
- Facilidad de repostaje
Estas ventajas se incrementan en el caso de coches que son alimentados por baterías que se cargan frenando o desacelerando el motor principal accionado por etanol. Además, las baterías híbridas pesan sólo un 2% más que las baterías de los coches exclusivamente eléctricos.
Otra de las principales ventajas del etanol como combustible es aquella relacionada con su capacidad para generar hidrógeno, por cuanto facilita y aumenta la disponibilidad de un combustible que no solo reduce emisiones, sino también mejora el rendimiento al reemplazar el alternador y motor de arranque por un dispositivo eléctrico multifuncional.
Posibilidades de convertir el etanol en hidrógeno verde
Algunos estudios muestran la posibilidad de convertir el etanol en hidrógeno en puntos próximos a las gasolineras, ayudando esto a contar con una mayor disponibilidad de este carburante, y ofreciendo una mayor distancia de recorrido.
Específicamente, en la actualidad un coche impulsado por híbrido con etanol alcanza los 17 kilómetros de recorrido por litro de combustible, mientras que la transformación del etanol en hidrógeno haría posible viajar hasta 40 kilómetros con un litro de este combustible convertido.
En un estudio de la Universidad de São Paulo se ha llegado a separar el hidrógeno del etanol para utilizarlo en coches livianos de pasajero como parte de una tecnología disruptiva. Sin embargo, esto no deja de tener sus inconvenientes.
Por ejemplo, una vez transformado el etanol en hidrógeno se presenta una de las dificultades con su almacenamiento, transporte y distribución, debiendo contarse con tanques de alta presión desde 500 hasta 900 Bar, el cual debería ser de titanio.
Precisamente lo que encarece esta propuesta sería el uso de este tipo de tanques, pues el titanio es un material muy recomendado porque es capaz de soportar esa alta presión; sin embargo, es demasiado costoso.
En conclusión, el etanol es un combustible que se considera muy limpio si se toman en cuenta las bajas emisiones de CO2. Además, presenta como una gran ventaja la posibilidad hacer realidad la fiebre del hidrógeno verde, lo cual hace pensar que los motores híbridos de etanol terminarán imponiéndose en la medida que avance la tecnología.
