España y Marruecos tienen una larga historia de relaciones que, como todos sabemos, han tenido sus idas y venidas. Hace cerca de dos décadas atrás la industria marroquí empezó a experimentar un fuerte crecimiento de la mano de empresas como Renault, que instalaron una fábrica que hoy en día es la más importante del país. Ahora buscan invadir el mercado europeo con baterías para coches eléctricos.
Marruecos se convierte en potencia automotriz: exportarán 1 millón de coches a Europa
El Estado marroquí lleva años realizando importantes inversiones y brindando facilidades económicas y fiscales para aquellas marcas que estén dispuestas a invertir en el territorio. Los beneficios que el país ofrece a las marcas automotrices, a los que se suman los tratados de libre comercio, podrían llevar a una situación complicada para las marcas europeas.
Si bien las relaciones de España con Marruecos no siempre se han caracterizado por la cordialidad y los buenos términos, desde que la mayoría de los coches españoles se empezaron a importar desde el país vecino, las cosas han cambiado considerablemente, llegando al punto de que el gobierno español casi llegara a cortar relaciones con Argelia por favorecer a los marroquíes.
En el último año, la fabricación de coches en Marruecos alcanzó unos 535.000 vehículos salidos de sus plantas, de los cuales, el 87% fueron exportados principalmente a la Unión Europea. Esto representa aproximadamente un 30% más que los números del 2022. Los beneficios de esta intensa actividad de la industria automotriz representan en este momento un 22% del PIB del país.
China y Marruecos se unen: producirán baterías baratas para inundar el mercado europeo y estadounidense
La cuarta parte de los productos exportados por Marruecos son automóviles y tienen planes para aumentar su capacidad de producción a 700.000 vehículos para el año que entra. Pero esto no es todo, ya que planean llevar este número a 1,4 millones para el 2028, igualando a la producción total de Francia y apenas por debajo de la manufactura industrial española.
La fabricación de coches ha dado gran impulso a la economía de los habitantes del país, empleando a unos 260.000 trabajadores hasta la fecha. Los tratados de libre comercio que Marruecos mantiene con la UE y que refuerzan con la infraestructura del puerto de Tánger, uno de los más importantes del mundo y con mayor capacidad de contenedores.
Estos factores convierten a la región en un puente muy atractivo para las marcas de coches eléctricos de China, que están lidiando con los aranceles que tanto la UE como Estados Unidos están imponiendo a sus importaciones. Es por eso que varias marcas asiáticas están desembarcando con importantes inversiones para iniciar la producción en las plantas marroquíes.
Los vehículos más vendidos en Europa: todos provienen de Marruecos
La UE se mantiene firme en la prohibición de los motores de combustión que se haría efectiva para el año 2035, lo que impulsa la necesidad de una mayor y más rápida adopción de los vehículos eléctricos. Sin embargo, las ventas de los eléctricos producidos por marcas europeas no son muy favorables debido al retiro de los incentivos estatales para su compra.
Algo similar pasa en Estados Unidos, donde los coches eléctricos chinos deben pagar aranceles de hasta el 100% y entre el 7% y el 25% para las baterías. Al producir sus vehículos en Marruecos, donde ya se fabrican unos 40.000 al año, China podrá exportarlos libremente sin pagar estos elevados costes.
Un duro golpe para España: 5000 puestos de trabajo que hemos perdido
El plan de China de llevar su producción a Marruecos es algo que ya se veía venir. Recientemente BYD, una de las marcas más importantes de este país, rechazó por segunda vez a España para instalar su siguiente fábrica en el país vecino. Esto nos ha costado no sólo 1000 millones de dólares de inversión sino también 5000 puestos laborales que se quedarán del otro lado del Mediterráneo.
