Adiós al cemento y al ladrillo en la construcción con este material: no se incendia, es reutilizable y mantiene la temperatura

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Publicado el: 11 de febrero de 2024
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Durante un largo periodo de tiempo, se han utilizado en la construcción elementos típicos como el hormigón, el ladrillo y cemento, además de algunos de sus derivados en la amplia industria de la construcción. Sin embargo, ahora llegó un innovador material que destronará estas tradicionales herramientas, debido a sus destacables beneficios con el medioambiente y sus innumerables peculiaridades.

Innovador material crea una revolución en el mundo de la construcción

El material en cuestión, a pesar de ser descubierto e implementado a principios del siglo XX, ha tomado un mayor protagonismo desde los años 90 y rápidamente se eleva su popularidad debido a que ofrece un sinfín de beneficios que brindarán soluciones rápidas y altamente eficientes.

Este crecimiento de este producto, se debe, en gran medida, a las múltiples ventajas que ofrece, especialmente el factor económico. Se trata de una técnica que ha comenzado a ser empleada en todo el mundo y en diferentes proyectos de gran relevancia dentro del mundo de la arquitectura.

Este panel de yeso no solo responde a las necesidades funcionales de la construcción, sino que cuenta con una notable capacidad de reutilización, alcanzando casi el 80 % de su aprovechamiento. Incluso, este material, además de ser un material no inflamable, actúa como aislante eléctrico, disminuyendo en gran medida los riesgos de descargas eléctricas.

Importantes características a tener en cuenta a la hora de comprar drywall

Con respecto a su eficacia térmica, es importante destacar que puede ser muy beneficiosa para sus consumidores, ya que tiene la capacidad de regular su temperatura de tal manera que se adaptará perfectamente a los sistemas de calefacción o aire acondicionado instalados en el interior de la construcción.

Entregando otras características generalizadas sobre el drywall, este mismo cuenta con una larga lista de beneficios, empezando por su fácil aplicación, el reducido tiempo de aplicación en construcciones y su costo limitado en comparación con los componentes mencionados anteriormente, sin contar su bajo impacto ambiental.
En palabras de la diseñadora de interiores y arquitectura Liliam de Barragán, este elemento se destaca por su versatilidad, encontrando aplicación común en la realización de cielos rasos, divisiones de espacios, paredes e incluso en elementos decorativos estructurales.

Ya se mencionó que la eficiencia en la instalación del drywall, sin embargo demanda considerablemente menos tiempo la instalación del material, hasta llegar a traducirse en una considerable reducción de hasta el 40 % a la hora de costear la de obra, según señala esta experta, Liliam de Barragán.

Este sistema no solo cuenta con una larga lista de beneficios para el consumidor, sino que producen un bajo rango de desperdicios, por lo que sus componentes generan un impacto mínimo a nivel ecológico. De igual modo, la maquinaria en la construcción de estos artefactos consume cantidades mínimas de energía.

El secreto del drywall: ¿qué lo diferencia frente al ladrillo tradicional?

La diseñadora mencionada, resalta una importante comparación entre los ladrillos y el innovador material, favoreciendo en gran medida a este último: «La diferencia más impactante se ve al compararlo con el ladrillo usado en mampostería común, pues este se fabrica a fuego con carbón, utilizando temperaturas altas que envían al ambiente gases contaminantes».

Rubén Darío Ortegón, uno de los especialistas que ha trabajado por más de 20 años con este innovador material asegura que el drywall puede ser sometido a altas temperaturas, al igual que su comportamiento al ser expuesto a altos niveles de humedad y no perjudicará su funcionalidad.

Finalmente, es necesario recordar que, a pesar de ser una estructura resistente, hay algunas precauciones que tener en cuenta a la hora de ser instalado y es que, debe ser fijado y anclado con las herramientas correctas, además de tener en consideración los pesos que deberá soportar con el paso del tiempo. Recordemos que cada lamina mide 1,22 metros por 2,44 metros y pesa por lo menos 20 kilos.