Las investigaciones en el campo de la física han dado como resultado descubrimientos asombrosos, especialmente en una rama muy poco conocida pero de gran auge como lo es la cuántica. Te presentamos algo que parecía imposible logrado por Italia: la transformación de la luz en algo increíble. Pasemos a ver.
Lo que es un supersólido y sus principales propiedades físicas como un compuesto cuántico
En principio, un material supersólido es un elemento que posee, en forma simultánea, dos estados que son contradictorios entre sí, puesto que se comporta como un superfluido que fluye sin viscosidad y, al mismo tiempo, posee una estructura que es cristalina, que tiene un aspecto similar a la sal.
Esta sustancia solo existe en el mundo de la física cuántica, por lo que no hay un equivalente del mismo en la física clásica. En Italia y en todo el mundo, solo se han visto en sistemas formados por átomos ultrafríos dominados por los fuertes efectos cuánticos sobre las interacciones en la realidad… hasta ahora.
Un experimento donde se transformó la luz en un objeto cuántico supersólido llevado adelante por Italia
Un equipo de investigadores adscritos al Consejo Nacional de Investigación (CNR) de Italia, ha logrado algo que ha revolucionado el mundo de la física cuántica: transformar la luz en un sólido. Como prólogo te podemos decir que hace poco más de una década, se había demostrado que la luz se podría comportar como un fluido.
Pero ahora este grupo de científicos ha ido más allá y ha desarrollado un material denominado supersólido originado a partir de la luz (un experimento que cambia la percepción y lo que sabíamos de la física cuántica similar a este donde conectaron con 37 dimensiones). Un avance muy grande en materiales cuánticos.
Para ello, el equipo procedió a sustituir las partículas ultrafrías por un semiconductor conformado por galio y arseniuro de aluminio, después lo colocaron sobre un área que tenía un patrón muy innovador que era de crestas estrechas. Al producirse la interacción entre el semiconductor y la luz, ocurrió algo inesperado.
Y fue que emergió un tipo de partículas que son híbridas, que se llaman polaritones, las que se encontraban restringidas por el semiconductor en su configuración, en el sentido de la limitación de sus niveles de energía y movimientos por lo que se transformaron en un nuevo material: un supersólido de luz.
Por lo sensacional del hallazgo y por ser la primera vez que se había creado este elemento bajo estas condiciones, este descubrimiento debía ser confirmado por los investigadores de Italia. Pero esta verificación representó un gran reto que no tenía precedentes, ya que implicó trabajar en el campo cuántico teórico.
Las aplicaciones de los supersólidos de luz: representan un gran avance para el mundo
Este gran descubrimiento, hecho en Italia, va mucho más allá de su uso científico en la física cuántica teórica, puesto que tiene muchas aplicaciones en la creación de nuevas tecnologías y el mejoramiento de otras, incluso en el campo de la sostenibilidad. Seguidamente, te mostramos algunas de ellas.
- Creación de nuevos elementos para avances en el proceso y almacenamiento de información y para la electrónica cuántica para mejorar el rendimiento de los ordenadores cuánticos a través del desarrollo de dispositivos de una gran eficiencia
- Aplicaciones en la energía fotovoltaica y creación de sensores cuánticos muy precisos, puesto que al tener la posibilidad de manipular la luz se desarrollarían sistemas solares de gran eficiencia y se podrían crear sensores con una alta sensibilidad
Concluyendo, Italia lo hace otra vez (hace poco inició la construcción de los hexágonos gigantes en el mar para generar energía sostenible), ahora ha creado algo que se creía imposible: transformar la luz en un supersólido que tiene dos estados simultáneos, sólido en forma de cristal y el de un superfluido.
