Hay eventos y cosas que parecen estar muy distantes y que no tienen ninguna relación entre sí, pues se diferencian en tamaño, magnitud y muchas otras características. Pero un suceso tan grande como el origen del universo y un lago africano tienen una conexión mucho más profunda de lo que podrías imaginarte.
Los grandes sucesos del universo influyen en zonas lejanas
El universo se originó con el estallido del Big Bang, de allí salió toda la materia que formaría cada uno de los cuerpos celestes y los demás elementos que contiene. Y a pesar de las grandes distancias, los diversos sucesos que ocurren en una determinada región del cosmos tienen influencia en otras muy lejanas.
Esto se evidencia en la relación que unos científicos encontraron entre una supernova y el lago africano Tanganica. Donde se determinó que hubo un incremento en los diversos virus que vivían allí hace 2 o 3 millones de años, cuando la Tierra era bombardeada por la radiación de la explosión de una estrella.
Un lago africano es afectado por sucesos cósmicos
La presencia de diversas formas de vida en la Tierra se debe a las condiciones propias del planeta, pero también recibe la influencia de distintas clases de sucesos cósmicos. Un ejemplo de ello es un lago africano, en el que hallaron evidencias de una relación entre el aumento de los virus que vivían allí y una supernova.
Se trata del lago Tanganica en África, que tiene 640 km de largo, uno de los más grandes y profundos que existen, y que contiene más o menos un 16% del total de agua dulce de todo el mundo. Está rodeado de montañas y se ubica entre 4 países, Burundi, la República Democrática del Congo, Tanzania y Zambia.
Unos científicos descubrieron que en ese cuerpo de agua ocurrió un gran incremento en la cantidad de virus que lo habitaban, y no solo eso, sino que también se volvieron mucho más complejos lo que sucedió hace 2 o 3 millones de años.
Una supernova que generó una burbuja de radiación que envolvió a la Tierra. Y los investigadores de la Universidad de California Santa Cruz relacionaron ambos sucesos, porque consideran que la emisión de radiaciones emanadas de ese fenómeno tuvo la capacidad de alterar las cadenas de ADN de esos virus.
Y, al parecer, los niveles de esa radiación cósmica que llegaron a ese lago africano no pudieron destruirlos, sino que solo llegaron a provocar una transformación favorable para la multiplicación de esos virus. Pero lo más interesante es que esos dos hechos se relacionan porque se dieron de forma simultánea.
El hierro permitió relacionar los virus con la supernova
Cuando una estrella llega al final de su vida, empieza a producir elementos cada vez más pesados, y el último de ellos es el hierro, que se deposita en su núcleo hasta hacerla estallar y convertirla en una supernova. Y fue el hallazgo de un isótopo de ese metal lo que permitió establecer la relación entre ese evento y los virus.
Pues los científicos encontraron hierro-60, que proviene de las supernovas, en el lago africano de Tanganica, y determinaron que tenía una antigüedad de 2.5 millones de años. Y en ese momento el sistema solar atravesó una burbuja de radiación de una supernova, que coincidió con el incremento de sus virus.
Concluyendo, una supernova generó una burbuja de radiación que alcanzó al lago africano de Tanganica, haciendo que los virus que lo habitaban se multiplicaran y se volvieran más complejos (algo que sucede en estos lagos que Francia ha hallado el modo de bajarles la temperatura desafiando el calentamiento global).











