La ciudad española que reduce las limitaciones a los paneles solares: zonas de colores para los permisos

Imagen autor
Publicado el: 26 de octubre de 2024
Síguenos
limitaciones a los paneles solares

Ante el uso masivo que están teniendo las soluciones energéticas debido a su bajo coste las ciudades españolas se han visto obligadas a imponer limitaciones a los paneles solares para tratar de preservar su patrimonio, sin embargo, una ha decido tomar el camino contrario ¿Sabes cuál es?

Si no se establecen limitaciones a los paneles solares podría suceder esto

Una gran disminución en los precios de las placas solares fabricadas en China, incluso por debajo del coste, ha conllevado a que muchos usuarios las estén adquiriendo en gran número y colocándolas en todas partes, desde terrazas hasta jardines.

Esta proliferación de paneles fotovoltaicos no representaría un grave problema en algunas ciudades modernas, porque estos se colocan en los tejados de las altas edificaciones con pisos, es decir, a menudo ni siquiera se ven.

No sucede así en ciudades con cascos históricos en el centro, donde las normativas establecen ciertas restricciones al uso de elementos tecnológicos, porque se procura que la visión de estos dispositivos no distorsione la imagen patrimonial.

Transición energética versus preservación patrimonial

Se trata de una situación algo compleja con dos perspectivas, una es la necesidad de que las personas que viven en el casco histórico puedan tener acceso a esta energía renovable y no se vean vulnerados los derechos ciudadanos, de manera que no se trascienda hacia un conflicto político.

La otra perspectiva o cara de la moneda es el deseo de que las edificaciones que conforman el centro sigan siendo consideradas por las UNESCO como Conjunto Histórico y no se incluyan dentro de la Lista de Patrimonio en Peligro.

Frente a esta disyuntiva ha surgido como salida intermedia el establecimiento de regulaciones para la instalación de paneles fotovoltaicos en la infraestructura que comprende el casco histórico de ciudades patrimoniales.

La ciudad turística histórica en el dilema de la transición energética o la conservación patrimonial

Córdoba es una de las ciudades donde las autoridades han optado por la derogación de la normativa que prohibía el uso de energía solar fotovoltaica y ha empezado a otorgar permiso de colocación de placas solares a los propietarios de edificaciones dentro del Conjunto Histórico.

No obstante, se trata de permisos de colocación que tienen sus excepciones, como por ejemplo no pueden colocarse placas fotovoltaicas en edificaciones catalogadas como BIC, es decir, Bien de Interés Cultural.

De igual modo, en aquellas construcciones donde puede instalarse paneles corresponderán determinadas limitaciones, dependiendo del color de la zona mostrada en el mapa del casco histórico, a saber:

  • Zona color gris: pueden instalarse antenas o aires acondicionados
  • Zona color salmón: Pueden instalarse placas solares de acuerdo a la aprobación de dos técnicos, uno municipal y otro de cultura
  • Zona color roja: Solo pueden colocarse paneles de última generación luego de la aprobación en un informe técnico.

Sin embargo, se presume que muchos informes técnicos desaprobarán la colocación de paneles, esto considerando que Juan Morillo, responsable de Arqueología en Córdoba, advirtió que la instalación de una placa en un BIC era como colocar uno de estos dispositivos en la Mezquita, es decir, casi imposible.

Transgredir las zonas de colores para utilizar energía solar en Córdoba

Las restricciones han provocado que algunos residentes del casco histórico pretendan instalar paneles de manera arbitraria, una situación ilegal que la GMU se ha mostrado dispuesta a combatir.

En todo caso, la instalación de placas con permiso también está restringida a ciertas condiciones como no colocar las placas a la vista, usar elementos de apoyo de color adecuados a la estructura patrimonial, color mate, por ejemplo.

En conclusión, ciudades españolas como Córdoba se han visto obligadas a reducir las limitaciones a los paneles solares, adoptando normativas regulatorias como el otorgamiento de permisos a propietarios de acuerdo a las zonas de colores en el centro histórico, aunque esto no ha significado la solución del problema.