El mundo de la tecnología de los motores está avanzando rápidamente con innovaciones cada vez más atrevidas. Es el caso de este motor que resultó ser un gran fracaso debido al uso de un tipo de combustible inédito, pero gracias a nuevos estudios e investigaciones decidieron volver a ponerlo en marcha de nuevo.
Un motor con una historia larga y llena de fracasos
Una compañía alemana, Polaris, fue contratada por la fuerza armada de ese país con la finalidad de desarrollar un propulsor que fue diseñado hace muchos años, pero que hasta ahora solo ha cosechado fracasos. Se denomina aerospike y usa como combustible una mezcla de oxígeno líquido y queroseno.
En teoría debería sustituir a los modelos tradicionales con tobera de campana en los vehículos espaciales, y hace poco se hizo una prueba, pero el avión tuvo una avería en el despegue. Pero no se rendirán y continuarán experimentando, porque si logran que funcione, les dará un nuevo impulso a los vuelos espaciales.
La industria aeroespacial sigue esperando por el aerospike
Desde hace mucho tiempo se está intentando mejorar el rendimiento de los aviones aeroespaciales, y hace unos 50 años crearon el modelo de motor aerospike, que en teoría tiene muchas ventajas sobre los que se usan actualmente. Pero su historia está llena de fracasos, y hasta ahora no se ha tenido éxito en las pruebas.
A pesar de todo, se sigue buscando la forma de hacerlo funcionar, porque su rendimiento sería muy superior a los que se usan actualmente. Que tienen una serie de limitaciones y dificultades, como el uso de la tobera en forma de campana que solo trabaja bien cuando está a nivel del mar, y a mayor altura no sirve.
Mientras que el diseño del motor aerospike resolvería este problema, ya que tiene la capacidad de adaptarse automáticamente a diferentes altitudes dentro de la atmósfera terrestre y en el espacio exterior. Hasta el presente, todo esto es teórico, pero hay varias empresas dispuestas a desarrollar el modelo y ponerlo en marcha.
Una de las más conocidas es Polaris, una empresa alemana que cuenta con el respaldo de la fuerza armada de ese país, y que hace más de un año hizo una prueba con este motor en un avión MIRA I, pero ni siquiera llegó a despegar. Sin embargo, no piensan parar y ya tienen listos a los MIRA II y III, con fuselaje de ala delta.
Que podrán ser reusados para ir y regresar de la órbita terrestre. Y una vez que todo quede en su punto, será mucho más sencillo llevar cargas y pasajeros como un avión normal, que llegarán hasta las estaciones aeroespaciales, usando este propulsor único que funciona automáticamente en cada fase del vuelo.
El propulsor Aerospike tiene el potencial de impulsar los vuelos espaciales
El renovado interés por el desarrollo del motor aerospike, a pesar de ser un diseño que no ha funcionado durante tanto tiempo, se debe fundamentalmente a dos factores. El primero son los grandes beneficios que se pueden obtener para la industria aeroespacial, y el segundo es que ahora se tienen herramientas.
Novedosas como la impresión 3D, que permite la fabricación aditiva basada en un modelo digital, que desarrolla mejor los detalles y, por tanto, el producto contará con una mayor precisión. Con este propulsor será posible transportar más peso y pasajeros hacia las estaciones espaciales, con vehículos más eficaces.
En definitiva, el aerospike ha sido hasta ahora un fracaso, pero los especialistas están decididos a ponerlo en marcha, usando como combustible una mezcla de queroseno con oxígeno líquido. Pues este motor aportaría grandes beneficios a los vehículos aeroespaciales, y facilitaría la movilidad a las estaciones aeroespaciales.
