La NASA a través de un satélite de sondeo de exoplanetas ha descubierto un planeta que se desintegra a tan increíble velocidad que muy pronto dejará de existir ¿Quieres saber más acerca de este cuerpo celeste que está desapareciendo?
Cuál es ese planeta que la NASA ha descubierto durante su proceso de desintegración
Gracias a un trabajo combinado entre astrónomos del MIT y de la Universidad de Pensilvania fue descubierto un planeta que ha sido bautizado con el nombre de BD+05 4868 Ab y que se mantiene orbitando alrededor de su estrella BD+05 4868 A.
Dicho cuerpo celeste se localiza aproximadamente a 141 años luz, siendo así el exoplaneta en desintegración más cercano; buscando ambos equipos de investigadores conocer más acerca del Telescopio Espacial James Webb (JWST) en BD+05 4868 dotado de tecnología infrarrojo y que se compara con el telescopio más grande del mundo.
El evento astronómico ha sido estudiado por la NASA mediante el satélite de sondeo de exoplanetas (TESS, siglas en inglés) y lo más interesante del hallazgo es la velocidad con que se lleva a cabo la desintegración de este cuerpo sideral.
Es algo que nunca se ha visto por la distancia a la que sucede la descomposición de las estrellas, y cuando apenas se percibe es porque el astro ha desaparecido en su totalidad.
Qué se observa en un cuerpo celeste que está desapareciendo
De acuerdo con Nick Tusay, quien dirigió la investigación, la visión de este exoplaneta en proceso de desintegración permite conocer más acerca de la composición de estos cuerpos celestes y de esta forma obtener respuestas a interrogantes sobre el origen de las estrellas.
Otro de los miembros del equipo de investigación hizo referencia a la oportunidad que brinda la observación de planetas en proceso de desintegración mediante espectrógrafos porque permite ver el interior de los mismos, algo que no es posible incluso con la Tierra y otros planetas cercanos.
Uno de los aspectos más impresionantes del planeta que se desintegra son las colas de polvo que se desprenden y que alcanzan casi una decena de millones de kilómetros cubriendo la mitad de la órbita planetaria durante treinta horas y media.
Específicamente, la cola de este cuerpo celeste presenta las siguientes características:
- De amplia prominencia
- Son gigantescas por tener una longitud de unos 9 millones de kilómetros
- Rodean más de la mitad de la órbita del planeta alrededor de la estrella cada 30 horas y media.
- Es densa y grande
- Al cruzar la cara de su estrella bloquea el 1% de su luz
- Afecta la señal de tránsito durante 15 horas
Hasta donde lleva la visión de un planeta reduciéndose a polvo cósmico
La magnitud de las dimensiones y densidad de esta cola es tan impresionante que al cruzar la faz de la estrella produce un bloqueo de la luz en un 1% y el tránsito de las señales luminosas se ven interrumpidas por un periodo de 15 horas.
El equipo de investigadores considera una verdadera suerte poder apreciar la descomposición del cuerpo planetario, sirviendo los datos obtenidos para emprender nuevas investigaciones en torno a sistemas en proceso de desintegración.
Una de las razones por la que es tan difícil observar este tipo de fenómeno astronómico es que la velocidad a la que se evapora el cuerpo celeste es simplemente cataclísmica.
A esta altísima velocidad de desaparición es toda una suerte presenciar las últimas horas del planeta moribundo, y mucho más fortuna es tener la oportunidad de recoger datos que sirvan como punto de referencia para futuros estudios de desintegración de estos sistemas.
Estos planetas prácticamente riegan sus contenidos por el espacio cuando se encuentran en este proceso, haciendo imprescindibles los medios tecnológicos disponibles para estudiar su composición, así como la de los planetas que orbitan otras estrellas es algo clave para la astronomía.
En conclusión, la observación que lleva a cabo la NASA del planeta BD+05 4868 Ab que está desintegrándose a velocidad récord es un indicador de los muchos eventos que pueden estudiarse para comprender el origen del universo, siendo este uno de los estudios que se suman a los realizados por la agencia espacial estadounidense.








