Este país quiere robarle el agua a España para producir una nueva energía: 5000 millones de litros que vamos a perder

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Publicado el: 14 de mayo de 2024
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España

Muchas veces habrás escuchado la frase «las próximas guerras serán por el agua». En esta ocasión, no hay una guerra, sin embargo, la polémica que ha escalado en el tablero internacional nos da una pequeña muestra de lo cerca que estamos de esa realidad. En plena era de uso medido de los recursos hídricos, este estado quiere reclamarle a España alrededor de 5000 millones de litros de agua.

¿Quién quiere robarle el agua a España?

El conflicto tiene sus raíces cuatro años atrás, en 2020, cuando se cerró la central térmica de Endesa debido al alto nivel de contaminación que estaba emitiendo ya cerca del final de su vida útil. El cierre de esta central dejó una reserva acuífera de unos 5,4 hectómetros cúbicos, cantidad que resulta ser justo el volumen de agua que requiere el proyecto Catalina.

Este proyecto prevé producir hidrógeno a partir de agua mediante electrólisis y espera reunir 2300 millones de financiamiento para la década de 2030.  Hasta ahora han obtenido 230 millones de la organización CHE (Confederación Hidrográfica del Ebro), dedicada a regular el aprovechamiento de la cuenca del Ebro por parte de los estados que rodean a la misma.

En el año 2021, los impulsores del proyecto Catalina, elevaron una petición a la CHE para que les otorgara la cantidad de agua necesaria para poner en marcha la primera parte del proyecto. El plan es obtener los 5400 litros que quedaron «libres» tras el cierre de la planta de energía que cerró, con lo que se irían más de cinco hectolitros hacia Andorra.

Cuánta energía podría producir Catalina

Con los fondos y el volumen de agua necesarios, el proyecto de hidrógeno verde de Andorra sería capaz de producir 84000 toneladas de este gas anualmente. Esto supondría un gran impulso para la producción de electricidad limpia, así como para otras industrias que emplean hidrógeno para diferentes procesos químicos libres de emisiones.

Según lo previsto por CIP y Enagás, los principales impulsores de este proyecto (de Copenhague y España, respectivamente), la planta debería estar completamente instalada y con capacidad para producir 336000 toneladas anuales de hidrógeno verde. Con esta cantidad de gas se podría cuadriplicar la cantidad de electricidad, de 500MW actuales a más de 2GW para mediados del 2030.

¿Se llevará Andorra los 5000 millones de litros de agua?

La solicitud realizada a la CHE lleva desde 2021 sin respuesta. En 2023 el proyecto fue declarado de Interés General de Aragón por el propio gobierno. Con esta etiqueta oficial los inversores del proyecto esperan agilizar un poco más las gestiones para hacerse con el agua que es de vital importancia para todo el proceso de producción de hidrógeno verde de su planta.

La construcción de la primera fase del proyecto debería iniciar a finales de 2025 y generaría miles de empleos tanto durante su construcción, como durante su operatividad. Serán muchas las industrias nuevas que se crearán en torno a esta gigantesca planta, así como muchas otras que se fortalecerán y crecerán, dando un gran impulso a la economía que resulta imprescindible en estos momentos.

Todo esto hace que tanto los inversores como los estados involucrados estén más que ansiosos por resolver la cuestión y poder empezar con las obras antes de tener que empezar a prorrogar las fechas programadas.

Un conflicto de difícil resolución

Por un lado, Andorra está solicitando una cantidad descomunal de recursos hídricos que serán destinados a la producción de energía en lugar de las necesidades básicas que tienen las personas. Por otro lado, este proyecto podría cuadruplicar la energía eléctrica de España y generar miles de empleos. Mientras tanto, quizás sea buena idea mirar incluso hacia la empresa japonesa que planea sacar hidrógeno del amoniaco.