La verdadera razón para llevar paneles solares al espacio: El interés oscuro de los gobiernos

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Publicado el: 18 de abril de 2025
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Paneles

Entre las razones para la instalación de paneles solares en el espacio estaría un interés de los gobiernos que hasta ahora no ha sido revelado, notándose que han aumentado los proyectos militares al respecto. Aquí veremos qué puede hacerse con estos dispositivos orbitando nuestro planeta.

La instalación de paneles solares en el espacio tropieza con barreras que desnudan los intereses 

Hay dos factores que se han convertido en fuertes obstáculos para llevar a cabo la antigua idea de recoger los rayos del sol provenientes del espacio y convertirlos en una fuente concentrada de energía, una es el elevado coste que esto implica y la otra es la ausencia de la tecnología que aligere o facilite el proceso.

Afortunadamente el factor coste económico como principal obstáculo de tal iniciativa o proyecto parece haber sido superado con el empleo de cohetes reutilizables al estilo de la compañía espacial de Elon Musk, lo que ha renovado el interés de algunos gobiernos y las grandes corporaciones en la energía solar espacial.

Asimismo, ha habido avances importantes en la mejora tecnológica de los recursos que podrían emplearse para un proyecto de esta naturaleza y ahora se cuenta con paneles solares de transmisión por microondas o unidades robóticas útiles para el ensamblaje de estaciones recolectoras de energía solar en el espacio.

A los esfuerzos por el aprovechamiento de la energía solar provenientes del espacio con el propósito de reducir las emisiones carbónicas y acelerar la transición energética se le suma un incipiente pero poderoso interés de fuerzas militares, tal como lo han dejado ver declaraciones de autoridades científicas chinas y portavoces del Pentágono.

Los militares y las corporaciones comerciales se ponen de acuerdo para repartirse la energía solar

Paul Jaffe, administrador de proyectos de tecnología táctica de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa o DARPA explica que el interés militar recae en la necesidad que estas fuerzas tienen de enviar combustible a lugares remotos, por cuanto llevar combustibles fósiles con aviones cisternas resulta escasamente factible.

Aparte de DARPA, la Fuerza Aérea y la Marina de Estados Unidos también se han incorporado a la realización de proyectos que involucran tecnología solar espacial y prueba de ello es el desarrollo y activación del Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea (AFRL) con el mantenimiento de un proyecto que tiene dos objetivos:

  1. Proporcionar energía a fuerzas desplegadas en sitios remotos
  2. Reducir el riesgo de utilizar convoyes de combustible

Respecto a las fuerzas navales, estas han establecido el Laboratorio de Investigación Naval (NRL) en el cual se está llevando a cabo un proyecto de conversión de radiaciones solares a microondas mediante la integración de un módulo denominado PRAM a un avión espacial de carácter secreto identificado como X-37B.

Los chinos empiezan bajo pero amenazan con subir y las criptomonedas estarán presentes

El proyecto más notable hasta ahora es el de la Academia China de Tecnología Espacial  o CAST, el cual consiste en el despliegue previsto para 2028 de varios satélites a baja órbita y posteriormente en 2030 colocarlos en órbita geoestacionaria, lo que indica la búsqueda de esa zona del espacio donde resulten más eficientes.

Igualmente se estima la incorporación de otras iniciativas comerciales y de otras agencias espaciales, como es el caso de SOLARIS por parte de la Agencia Espacial Europea  o ESA, con el propósito de estudiar la viabilidad de implementación de estaciones de energía solar en el espacio para el suministro de energía limpia a la Tierra.

Entre las iniciativas comerciales resalta Aetherflux de Baiju Bhatt, cofundador de Robinhood, una plataforma de comercio de criptomonedas, la cual se plantea dentro de 2 años demostrar también la viabilidad, partiendo de una inversión inicial de 10 millones de dólares para orbitar un prototipo a unos 500 kilómetros de altitud.

En conclusión, la verdadera razón de los gobiernos para llevar paneles solares al espacio no es tan oscura como parece y tiene que ver con la vinculación de la economía con la transición energética, aunque para implementar esta iniciativa igualmente tropiezan con el factor coste, pues sigue siendo algo caro poner en órbita unas placas a llevar sol.