La solución para el cambio climático no es única, sino que se requiere una combinación de tecnologías que sean innovadoras y sostenibles para dejar de depender en su totalidad de combustibles fósiles. Aquí te traemos una minirefineria solar creada en Suiza que produce combustibles líquidos.
Un proyecto que genera energía en forma de combustible líquido
La Escuela Politécnica Federal de Zúrich, también llamada ETH Zürich y reconocida por ser la escuela de donde egresó Albert Einstein, ha establecido una alianza con la compañía derivada Synhelion, que se dedica a la investigación y desarrollo de tecnología sustentable y amigable con el medio ambiente.
Gracias a esta alianza fue construido el prototipo de una minirefineria fotovoltaica la cual está destinada a producir combustible líquido del tipo neutro en carbono a partir del aire y la energía solar. Este tipo de combustibles biosintéticos contribuyen a la descarbonización del sector transporte terrestre y marítimo.
¿Cómo es esta minirefinería solar que se encuentra en un tejado suizo?
Esta minirefinería tiene el aspecto de una gigantesca antena parabólica que se encuentra en el tejado de uno de los edificios de la ETH Zürich y tiene un ancho de casi cinco metros por otros tantos de largo. Toda la superficie está cubierta de espejos con un espejo más pequeño que sobresale sobre todos.
El pequeño espejo cumple la función de concentrar la luz del sol en el área de los espejos grandes los que envían esta energía transformada hacia el reactor, concretamente hacia sus dos recipientes. Esta energía solar está concentrada unas 3000 veces y calienta el reactor a una temperatura de 1500 grados celsius
Luego, dentro de los recipientes del reactor el dióxido de carbono y el agua se descomponen en monóxido de carbono e hidrógeno para formar una combinación bautizada como gas de síntesis. Todo el proceso es visible ya que, transcurridos unos minutos, el recipiente tomara un color anaranjado brillante.
Lo cual es indicativo de que el recipiente se ha calentado. El fin de todo el proceso es la creación del gas de síntesis que es la materia prima a partir de la cual se pueden generar combustibles como el metanol que serían neutros en CO2. El agua y el gas que se usa en el proceso es extraído previamente del aire.
Mediante un proceso propio creado y perfeccionado en la ETH Zürich (todo el desarrollo puede ser complementado con la generación de energía eléctrica a partir de este cristal). Sin embargo, al ser un prototipo solo tiene la capacidad de generar 100 mililitros de combustible, pero se ha demostrado que es muy eficiente.
Por otra parte, esta tecnología tiene un enfoque más directo en el uso de los recursos que los métodos electroquímicos que emplean la luz del sol para crear combustibles ecológicos. A pesar de todo, y como toda tecnología solar, requiere que la energía del astro rey sea lo suficientemente intensa.
En este sentido, en Zúrich se tiene en promedio, una radiación solar de unos 1200 kWh anuales por metro cuadrado. En áreas desérticas este número puede alcanzar los 3500 kWh / año. Como es directamente proporcional a este parámetro, quiere decir que la minirefineria producirá tres veces más en el desierto.
La creación de un equipo que produzca millones de litros de metanol
Actualmente se está trabajando, de manera intensa, en una versión de esta minirefineria que será mucho más grande. Requerirá una nueva localización, ya que necesitará sobre los 2000 kWh anuales para producir metanol en forma industrial. Se espera tener operativo ese sistema para mediados del 2026.
En conclusión, esta minirefineria solar creada en Suiza es una tecnología de producción de combustibles líquidos ecológicos que revolucionará el mercado (como lo está haciendo esta forma de generación de este carburante que también es limpio, que no es electricidad ni hidrógeno).













