La electrificación de los vehículos se ha convertido en la opción más atractiva para acabar con la contaminación causada por el transporte. Sin embargo, todavía tiene que superar algunos obstáculos, y en este caso Musk lo admite porque ya no hay solución, y se acabó para Tesla en España y el mundo.
La conducción autónoma es tan solo una ilusión
La evolución de los coches eléctricos no ha sido un camino fácil, se ha necesitado investigación, compromiso y cometer muchos errores para alcanzar el nivel que se tiene hoy en día. Sin embargo, todavía queda mucho por hacer y mejorar para que realmente sea una opción que esté al alcance de las masas.
En este mundo, Musk es un personaje controversial que ha realizado anuncios que no siempre se cumplen. Uno de ellos es el del Full Self-Driving (FSD) o sistema de conducción autónoma, que aún no es tal, pues el conductor debe estar atento para actuar, así que por ahora sigue siendo tan solo una ilusión.
Musk lo prometió pero no lo pudo cumplir
Tesla es un gigante en el mercado de la electrificación de los vehículos, es una empresa innovadora y una de las que más vende. Y aunque hay que reconocer la visión que ha tenido Musk en esta área, una de las cosas que lo ha hecho más conocido son sus anuncios acerca de sus futuros logros, que no siempre se cumplen.
En España y el mundo, se está hablando mucho acerca del sistema de conducción autónoma de Tesla, conocido en inglés como Full Self-Driving (FSD). Pues todo lo que tiene que ver con eso ha resultado ser una fuente de controversias, empezando por el nombre, que hace suponer mucho más de lo que es.
Porque en realidad actúa más como una ayuda de conducción, puesto que el conductor debe estar pendiente de todo lo que pasa, y estar listo para tomar las riendas de la situación en cualquier instante. Pero este no es el único problema con el sistema, pues desde el año 2016 ya hubo un compromiso.
Y era que todos los coches estarían equipados con un hardware capaz de sustentar el sistema de conducción autónoma en su totalidad. Sin embargo, en 2019 tuvieron que aceptar que era necesario contar con más capacidad, y había que actualizarlos con la computadora HW3, lo que se hizo gratis, por orden de un juez.
Con el desarrollo del hardware HW4 pasó lo mismo, y se hizo evidente que los HW3 no podrían con el sistema de conducción autónoma. De forma que Musk se comprometió a actualizar gratuitamente solo a quienes compraron el paquete con FSD, que costó miles de dólares, los demás tienen que pagar por ello.
La conducción autónoma todavía está lejos de la realidad
Desde el año 2016, Elon Musk ha prometido la conducción autónoma de sus coches eléctricos a través del sistema Full Self-Driving o FSD. En ese momento, el hardware de los Tesla era el HW2, y se suponía que debía ser capaz de soportarlo, no fue así, y hubo que actualizar todos los vehículos al HW3 del 2019.
En 2024 el empresario tuvo que reconocer que ese tampoco lo soportaría, y solo lo hará el HW4 (a pesar de que Musk había anunciado el Tesla más futurista). Por otra parte, el FSD todavía no es capaz de asumir por completo la conducción de los coches, así que la realidad se sigue resistiendo a sus anuncios.
En definitiva, los anuncios de Musk acerca de la conducción autónoma todavía no se han concretado, y más bien sigue siendo una ayuda para el conductor (además en España está prohibida por lo que no podrán circular los coches de este tipo). Además, choca con la realidad porque la tecnología no deja de avanzar.
