Comenzamos la semana hablando del fraude histórico de las marcas de coches eléctricos que les ha obligado a venderlos casi regalados. Sin embargo, ahora encaramos su final con una medida esperada, pero sorprendente, del transporte público. El patinete eléctrico está de vuelta, y el fin de su prohibición solo depende de que hagas esto la próxima vez que lo quieras llevar a bordo.
Los patientes eléctricos vuelven al transporte público: por qué estaban prohibidos
El transporte público en España ha dado marcha atrás a la prohibición de llevar patinetes eléctricos. En los últimos años, los patinetes eléctricos se han convertido en un medio de transporte urbano muy popular. Sin embargo, muchas ciudades españolas habían prohibido llevarlos en el metro, autobuses o trenes.
Esta prohibición respondía a motivos de seguridad, ya que los patinetes ocupan espacio y podían obstaculizar el tránsito de personas. Además, en caso de accidente o incendio podían dificultar la evacuación. Pero recientemente se ha decidido permitir de nuevo su transporte bajo ciertas condiciones.
De cualquier modo, esta vuelta no será tan ambiciosa como muchos esperan, es decir, no se volverán a llevar sin limitaciones como antes. En realidad, lo que hemos conocido es un truco para portarlos de manera legal y sin riesgo a que te pongan una sanción que alcanzaría los 200 euros.
Este es el truco para llevar los patinetes eléctricos en el transporte público
La normativa sobre el uso de patinetes eléctricos en el transporte público no ha cambiado en absoluto, puesto que Renfe y los ayuntamientos tampoco han decidido dar marcha atrás. Sin embargo, sí que es posible llevarlos de un modo que es completamente legal y seguro para los usuarios.
Una parte muy importante de los autobuses —no así en el caso del metro— cuenta con maletero distanciado del habitáculo interno, es decir, separado de donde van los usuarios. En este espacio, sí que puedes llevar el patinete eléctrico con tranquilidad, de hecho, es el único lugar autorizado.
Por otro lado, siempre es necesario que vaya guardado y apagado, plegado sin que ninguna parte sobresalga de la mochila y con su funda. Lo ideal es que sea uno de los que la DGT considera homologados, de ese modo, te evitas problemas y puedes ciruclar con él con tranquilidad.
La normativa, por ciudades: esto es lo que han aclarado los ayuntamientos
La prohibición de llevar patinetes eléctricos en el transporte público en España se remonta a finales de 2013. En aquel momento, el aumento del uso de estos vehículos de movilidad personal (VMP) en las ciudades estaba generando algunos problemas de convivencia con los peatones y en el transporte público.
Los patinetes eléctricos empezaron a popularizarse gracias a las empresas de alquiler que los pusieron a disposición de los ciudadanos. Su tamaño reducido y su capacidad de plegarse facilitaba que los usuarios los llevaran consigo en metro, autobús o tren para combinar este transporte con el patinete.
Sin embargo, la presencia de los patinetes en los vehículos del transporte público comenzó a generar quejas entre los viajeros por ocupar espacio, dificultar los desplazamientos dentro del vehículo e incluso provocar tropiezos y caídas (luego, en los aviones recuerda que no puede ir ni facturado).
Ante esta problemática, en 2023 fue Renfe quien, en una inesperada y polémica medida, prohibió por completo el acceso con patinetes eléctricos en metro y autobús. Poco después, Renfe también los prohibió en cercanías y media distancia, de cuya noticia recordarás que nos hicimos eco.
Está claro que la vuelta de los patinetes eléctricos al transporte público era algo ansiado, pero no por ello menos polémico. Lo cierto es que son tantos los usuarios que pedían el fin de la prohibición como los que se alegran de que no se haya consumado al 100 %. Sin duda, algo tan sorprendente como estas nuevas carreteras que derriten su nieve y ya van a probar en España.













