La gestión del vertido en la comarca de La Lora ha supuesto un avance significativo en la recuperación ambiental de una zona gravemente afectada por la acumulación de residuos contaminantes.
Tras meses de trabajos intensivos, las autoridades han logrado eliminar varios depósitos ilegales y retirar cerca de 600 toneladas de materiales contaminados, reduciendo de forma notable el riesgo para el medio ambiente y la salud pública.
El vertido, detectado en un área de alto valor ecológico, generó una gran preocupación entre vecinos, administraciones y organizaciones ambientales. Los residuos, compuestos por materiales industriales y restos potencialmente peligrosos, amenazaban con contaminar el suelo y las aguas subterráneas, además de afectar a la fauna y la vegetación del entorno. Ante esta situación, se puso en marcha un plan de actuación urgente para contener y revertir el impacto.
Cómo la gestión del vertido recupera el antiguo campo petrolífero de La Lora
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha concluido las labores de control y gestión del vertido detectado en el campo de producción de la extinta concesión de explotación de hidrocarburos líquidos y gaseosos “Lora”, en el municipio burgalés de Sargentes de La Lora, en las que ha invertido 445.698,46 euros.
La gestión del vertido en la comarca de La Lora ha supuesto un avance significativo en la recuperación ambiental de una zona gravemente afectada por la acumulación de residuos contaminantes.
El vertido se detectó en abril de 2024, al pie de tres depósitos, y poco después el Consejo de Ministros acordó ejecutar las actuaciones de control y gestión con carácter inmediato, con un presupuesto global de un millón de euros, que no ha sido necesario agotar. El Grupo Tragsa se ha encargado de ejecutar los trabajos.
Limpieza de pozos y actuaciones de seguridad
A grandes rasgos, las actuaciones han consistido en la eliminación de los tres depósitos, retirando el hidrocarburo y los suelos afectados; la limpieza de la mezcla de hidrocarburo y agua en 20 pozos de la antigua explotación y su posterior relleno con áridos; el vallado de varias áreas para evitar accesos no autorizados, el vaciado e inertizado de otros depósitos, y la colocación de cartelería de advertencia.
En total se han gestionado 376 toneladas de hidrocarburos y aguas emulsionadas y 234 toneladas de tierra afectada por hidrocarburos.
Estas medidas incluyen la recuperación del suelo, la revegetación con especies autóctonas y la vigilancia ambiental a medio y largo plazo, con el objetivo de asegurar que no queden restos contaminantes y que el ecosistema pueda regenerarse de forma natural.
El MITECO ha contactado con la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Junta de Castilla y León para colaborar en la recuperación y la conservación de los Bienes de Interés Cultural del antiguo campo de producción, como los testigos de perforación de cada pozo.
El MITECO también ha informado de las actuaciones realizadas al Juzgado de lo Mercantil número 1 de Burgos, encargado del concurso de acreedores de la mercantil Compañía Petrolífera de Sedano, titular de la explotación, al objeto de que tenga en cuenta los costes incurridos, ya que deben correr por cuenta de la compañía.
Estas medidas incluyen la recuperación del suelo, la revegetación con especies autóctonas y la vigilancia ambiental a medio y largo plazo, con el objetivo de asegurar que no queden restos contaminantes y que el ecosistema pueda regenerarse de forma natural.
La actuación en La Lora pone de manifiesto la importancia de una gestión eficaz y coordinada frente a los vertidos ilegales. La rápida intervención ha permitido transformar una situación de grave deterioro ambiental en una oportunidad para reforzar la protección del territorio. Asimismo, el caso subraya la necesidad de prevención, control y concienciación ciudadana para evitar que este tipo de prácticas se repitan y garantizar la conservación de espacios naturales de gran valor. Seguir leyendo en ECOticias.com
